La capacidad de la izquierda para la discusión, el lío y la bronca, después de una legislatura, la pasada, en que el proyecto de unidad implosionó de mala manera, no parece tener fondo. El acuerdo entre Podemos, IU, Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz para confluir en Por Andalucía tuvo un mal arranque, en el límite del plazo (Podemos está legalmente fuera de la coalición) para ir conjuntamente a las autonómicas.

El resultado de junio fue pírrico, unos escasos e irrelevantes cinco escaños (el PP sacó mayoría absoluta), que les dio por los pelos para formar un grupo propio y que, fruto de la distribución provincial de escaños, dio lugar a este reparto de diputados entre partidos: tres de los parlamentarios son de Podemos; otra, la candidata a la Junta, y ahora portavoz, Inma Nieto, de IU, y una más de Más País.

Las discordias entre todas las fuerzas nunca terminaron (ni siquiera durante la campaña electoral, ni tampoco ahora) y la legislatura ha arrancado con un lío en el grupo parlamentario: se ha producido un cambio, muy lejos de ser pacífico, en la representación del grupo en la mesa. La diputada de Podemos Alejandra Durán ha sido sustituida, por sorpresa, asegura Podemos, mediante un escrito firmado por Nieto, por Esperanza Gómez, de Más País, que además, en otro acto, también ha sido nombrada portavoz adjunta del grupo.

Según fuentes de IU, el cambio es "temporal" y es tan solo "una sustitución para mejorar el funcionamiento del grupo". Han existido "disfunciones" que lo justifican, según afirman. Fuentes de Podemos ponen nombre a esas "disfunciones" y aseguran que se trató del intento de nombrar a Gómez como portavoz adjunta por la puerta de atrás. Los cambios, aseguran, se han hecho sin consensuarlos de ninguna de las maneras con ellos: "Helados nos quedamos [al conocerlos]", dijeron a Público.

Pinza

Estas decisiones las ha tomado, según IU, "la coalición". Traducido, una mesa en la que están las seis fuerzas políticas. En ella, IU, Más País, Equo e Iniciativa tienen mayoría. Podemos considera que hay que "trabajar en los temas de oposición" y que las decisiones "importantes" deben "aprobarse por mayoría cualificada". "No puede ser que se apruebe por la coalición de cuatro y nosotros solo estemos para acatar decisiones sin contar con el propio Grupo Parlamentario [en el que Podemos tiene tres diputados de cinco]". "Pero se negaron por completo", aseguran las fuentes de Podemos, cuando lo han planteado.

Los nombramientos de algún modo, dejan fuera de juego a Podemos, que tiene mayoría de parlamentarios, y le dan por el momento el control del grupo a IU y Más País, que tienen la capacidad de decidir qué se dice en la mesa y cuentan además con la portavocía del grupo, decisiva en el día a día, según el reglamento del Parlamento.

En Podemos analizan que "IU ha hecho pinza con Más País" con la idea de reducir su poder y capacidad de decisión y agregan que IU pactó cosas con Más País que ellos desconocen y que ahora lo que se está viendo su ejecución.

El acuerdo hecho público la noche en que se cerró el pacto político entre IU y Podemos recogía una portavocía adjunta para Podemos y un reparto a partes iguales del dinero (que finalmente se acerca a los 700.000 euros anuales). Más País solo aparecía con el número uno por Sevilla. El capítulo del dinero, muy importante, aún no está resuelto.