"Temas que a nadie le importan, por los que nadie pregunta: la ley del bienestar animal, que nadie sabe exactamente lo que es; los transexuales, eso no le importa, hablemos de los temas que realmente le afectan a la gente". Palabra de Mariano Rajoy.

¿Sorpresa en Melilla? Nada nuevo bajo el sol, porque la arremetida del expresidente del Gobierno, quien se ha enrolado en la campaña del Partido Popular para tratar de aupar a Alberto Núñez Feijóo a la Moncloa, forma parte de una estrategia camaleónica para endurecer su discurso y opacar a Vox. Es decir, la victoria a cualquier precio, incluido el peaje de la voxización del supuesto exmoderado del PP.

Irene Montero: "Las vidas trans sí importan"

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha contestado a Mariano Rajoy que "las vidas trans sí importan". A través de su cuenta de Twitter, dejó clara su posición y arremetió contra el expresidente, una crítica a la que se sumaron los dirigentes de Sumar.

Ernest Urtasun ha comentado que es una "vergüenza que alguien que ha sido presidente" diga que las "personas trans y sus derechos no importan". El portavoz de campaña añadió: "El PP no necesita a Vox para hacernos retroceder. Lobos con la piel de cordero".

Por su parte, Elizabeth Duval le ha respondido en la misma línea: "Claro que esas leyes importan". La portavoz de feminismos y derechos LGTBi de Sumar ha criticado, además, los bulos sembrados por el Partido Popular ante la inminencia del 23J.

"Lo que de verdad le gustaría al PP que no importara o preocupara a nadie y tapan es otra cosa, a la que han dedicado esta campaña: la mentira y el engaño, sembrar desconfianza sobre instituciones como Correos o repetir falsedades sistemáticamente", afirmó Duval.

Finalmente, el líder de Más País, Íñigo Errejón, se ha cuestionado "cuánto de miserable tienes que ser" para hacer esas afirmaciones.

Rajoy, contra el "Gobierno Frankenstein"

Durante su intervención en un acto político del PP en Melilla, Rajoy abogó por hablar de "los temas que realmente importan" y, por ello, recordó a Miguel Ángel Blanco, el concejal popular de Ermua asesinado por ETA, y lamentó la política de traslados de presos a Euskadi en los últimos años.

El expresidente, además, cargó contra el "Gobierno Frankenstein" y criticó el indulto del Tribunal Supremo a los condenados por el procés en Catalunya, así como la rebaja del delito de malversación "para que estuvieran contentos algunos de quienes apoyaban al Gobierno".

Paradójicamente, pese a sus duras palabras, aseguró que nuestro país atraviesa "la polarización más elevada" desde que se aprobó la Constitución en 1978. "Nunca", según Rajoy, "hubo un nivel de enfrentamiento como ahora y una ruptura de consensos básicos que en cualquier país normal deben existir".