Público
Público

​Rajoy evita la autocrítica y el PP entra en pánico ante Ciudadanos

El presidente del Gobierno recuerda que en las europeas, los conservadores lograron 300.000 votos menos en Andalucía que en el 22-M. Apuntala la continuidad de Moreno al frente de la formación autonómica. 12 barones se han ausentado del encuentro en Génova.

María Dolores de Cospedal y Mariano Rajoy, durante el comité nacional del PP, este lunes. /EFE

MADRID.- Cualquier tiempo pasado fue peor. Ése es el mantra de Mariano Rajoy, a tenor de las reflexiones que ha hecho este lunes ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP que preside. El líder conservador evitó completamente la autocrítica que le reclaman sus dirigentes desde este domingo, cuando se confirmó el descalabro del PP andaluz en las elecciones ídem, con 17 escaños menos (33) que en 2012 (50). Rajoy recordó a sus dirigente que el 22-M, el PP logró 300.000 votos más en Andalucía que en las europeas. Además, se mostró seguro de que su partido ganará las municipales y autonómicas el próximo 24 de mayo, porque los resultados andaluces de ayer domingo "no son extrapolables" al resto del territorio.

Varios responsables del PP en todo el país han asegurado que hace falta un cambio de estrategia. Lo están haciendo en privado y lo han hecho públicamente esta misma mañana. Así, a su entrada en la sede nacional del PP, la presidenta del partido en Catalunya, Alicia Sánchez-Camacho, por ejemplo, pedía una "mejor" comunicación con los ciudadanos, porque los resultados en Andalucía "no son buenos". También los ministros de Asuntos Exteriores o de Industria, José Manuel García-Margallo y José Manuel Soria, reconocieron los malos resultados, "infinitamente peores" de lo esperado, según el jefe de la Diplomacia española.

Durante su discurso a puerta cerrada en el Comité, Rajoy quiso apuntalar el liderazgo de Juanma Moreno en el PP andaluz, para evitar movimientos internos en su contra. El presidente del Gobierno aseguró que es un líder "con futuro, algo que el propio Moreno ratificó en su discurso, mostrando su "orgullo" por el trabajo realizado y advirtiendo de que "para ganar, hay que perder" primero. En línea con lo trasladado este domingo, en su comparecencia al conocerse la debacle de su partido, Moreno aseguró que el PP representa "el cambio en Andalucía" y ese cambio llegará "más pronto que tarde".

Duro ataque de Aguirre

Sólo Esperanza Aguirre, candidata del PP al Ayuntamiento de Madrid, fue muy crítica con la elección de Moreno hoy en Telemadrid: "No ha logrado quitarse de encima el estigma de su nombramiento a dedo", ha recordado la también presidenta del PP regional. Aguirre cargaba de esta forma también contra Rajoy, que apostó personalmente por Moreno -tras proponérselo la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y Javier Arenas- cuando María Dolores de Cospedal y el entonces líder del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, tenían cerrada la designación de José Luis Sanz, alcalde de Tomares (Sevilla) y número dos del partido en Andalucía. Precisamente, la secretaria general del PP ha evitado comparecer hoy ante la prensa al término del Comité y ha delegado en Floriano. Cospedal anunció hace días que estaba barajando la posibilidad de dejar su responsabilidad en la cúpula del partido si gana las autonómicas en Castilla-La Mancha y en su partido hay ya quien interpreta lo de hoy como un gesto de salida.

De cara a la galería tanto Rajoy como el responsable de la campaña, Carlos Floriano, que compareció en rueda de prensa al terminar el Comité Nacional, han querido restar importancia a la entrada de Podemos y Ciudadanos en el Parlamento andaluz. Pero en el PP, la entrada de los de Albert Rivera con nueve escaños (muy por encima de lo pronosticado en los sondeos) ha desatado el pánico. Los conservadores son conscientes de que la mayoría de los votos perdidos (medio millón desde 2012) "se han ido por Ciudadanos" y ese trasvase "sí es extrapolable" a los comicios del 24 de mayo, alertan dos voces muy críticas y preocupadas con los próximos comicios.

Espantada en Génova

A pesar de los intentos de Floriano por justificar las llamativas ausencias de barones en el Comité de hoy ("Están centrados en sus campañas"), lo cierto es que de puertas adentro, la desolación del PP se hacía más visible con la docena de asientos vacíos de todos los presidentes regionales, menos Cospedal, jefa del Ejecutivo de Castilla-La Mancha. Tal vez porque no les pareciera la mejor idea hacerse hoy la foto en Génova, no acudieron al Comité Ejecutivo, convocado el miércoles de la semana pasada, Ignacio González (Madrid), Alberto Núñez Feijóo (Galicia), José Antonio Monago (Extremadura), Alberto Fabra (Comunitat Valenciana), Juan Vicente Herrera (Castilla y León), Pedro Sanz (La Rioja), Ignacio Diego (Cantabria), Luisa Fernanda Rudi (Aragón), José Ramón Bauzá (Baleares), Alberto Garre (Murcia) o los presidentes de Ceuta y Melilla, Juan Jesús Vivas y Juan José Imbroda.

Quien sí acudió al Comité de hoy fue la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a quien en el entorno de Cospedal y un amplio sector del PP responsabilidad de la estrepitosa derrota del partido en Andalucía ayer, por haberse empeñado en poner a un sorayo (miembro de su núcleo más cercano) de candidato desconocido en la Comunidad y -lo que es peor-, ajeno completamente al complicado panorama político andaluz.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias