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La Cumbre de Montreal acuerda proteger al menos el 30% de la superficie del planeta para preservar la biodiversidad

Con un horizonte temporal fijado en el año 2030, 196 países se comprometen a que las zonas dedicadas a la agricultura, la acuicultura, la pesca y la silvicultura se gestionen de forma sostenible y a restaurar ecosistemas degradados.

La secretaria ejecutiva de la Convención sobre Diversidad Biológica, Elizabeth Maruma Mrema; y el presidente de la Conferencia de la ONU sobre Biodiversidad COP15, el chino Huang Rinqiu, participan hoy en el cierre de la sesión ministerial en Montreal (Ca
La secretaria de la Convención sobre Diversidad Biológica, Elizabeth Maruma y el presidente de la Conferencia de la COP15, Huang Rinqiu, en el cierre de la sesión ministerial en Montreal. Julio C. Rivas / EFE

Proteger al menos el 30% de la superficie del planeta para preservar la biodiversidad antes del año 2030. Este es el principal compromiso al que han llegado las delegaciones de los 196 países participantes en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Biodiversidad de Montreal (Canadá), COP15. Pero no es el único.

Los firmantes del acuerdo garantizarán que las zonas dedicadas a la agricultura, la acuicultura, la pesca y la silvicultura se gestionen de forma sostenible, con un incremento sustancial del uso de prácticas respetuosas con la biodiversidad y se restaurarán el 30% de los ecosistemas degradados como mínimo.

El acuerdo alcanzado en la madrugada de este lunes hora local, según recoge Efe, contiene también el compromiso de actuar en tierra y mar para que la pérdida de zonas de gran importancia para la biodiversidad, incluidos los ecosistemas de alta integridad ecológica, se aproxime a cero para 2030. Un plan que se deberá llevar a cabo respetando los derechos de pueblos indígenas y comunidades locales.

El texto final establece cuatro metas a 2050 y 23 objetivos a 2030 para lograrlas, unos puntos que forman parte del borrador propuesto por la presidencia china de la COP15. El objetivo ahora es establecer una guía para revertir la pérdida de biodiversidad y que esté en el camino de la recuperación en beneficio de todos, ha subrayado el ministro chino de Medio Ambiente, Huang Runqiu, durante el plenario final.

Para financiar la restauración y protección de la biodiversidad se movilizarán a 2030, vía acciones nacionales e internacionales, al menos 200.000 millones de dólares al año, procedentes tanto de fuentes públicas como privadas. En paralelo, los países más ricos proporcionarán al menos 20.000 millones al año según los objetivos fijados para 2025 y 30.000 millones al año según los objetivos fijados para 2030 a los países en vías de desarrollo para la preservación de su naturaleza.

Se movilizarán a 2030 al menos 200.000 millones de dólares al año a modo de financiación

Asimismo, las partes también se comprometen a reducir a la mitad el exceso de nutrientes y el riesgo global que suponen los pesticidas y los productos químicos altamente peligrosos a 2030. Además, los países han acordado trabajar para suprimir progresivamente o reformar subvenciones que perjudican a la biodiversidad en, al menos, 500.000 millones de dólares al año, al tiempo que aumentarán los incentivos para la conservación y el uso sostenible de la misma.

Otros puntos del acuerdo van desde prevenir de la llegada de especies exóticas invasoras y dificultar establecimiento en las distintas zonas geográficas, hasta la reducción a la mitad del desperdicio alimentario y la rebaja significativa del consumo excesivo y la generación de residuos. El texto incluye también exigir a las grandes empresas e instituciones financieras que controlen, evalúen y divulguen sus riesgos, dependencias e impactos sobre la biodiversidad.

Metas para 2050

Entre las metas fijadas a largo plazo se encuentra el plan para detener la extinción inducida por el hombre de las especies amenazadas y reducir diez veces la tasa de extinción y el riesgo de extinción de todas las especies.

Además, para cumplir estos objetivos se procurará repartir de forma justa y equitativa los beneficios derivados del uso de los recursos con los pueblos indígenas y la comunidades locales, y, en paralelo, usar sus conocimientos para contribuir a la conservación y uso sostenible de la biodiversidad.

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