José Corbacho es una de las figuras más polifacéticas de la pequeña pantalla española. En su currículo figura como actor de teatro y televisión, director de cine y creador de contenidos audiovisuales.

Ahora, tras una época escondido entre bastidores, Corbacho se va de gira con el Terrat Pack y anuncia que ya está preparando su próxima película junto a Juan Cruz. El año que viene intentará comenzar el rodaje, aunque 'aún está por confirmar'.

Tras su éxito como director con películas como Tapas' (2005) y Cobardes' (2008) y la serie Pelotas', desapareció de la escena mediática. ¿Por qué?

'Tengo muchas ganas de rodar una película el año que viene'

Pero sigo vivo. Es cierto que cuando uno desaparece de la televisión, la gente tiene la impresión de que ya no trabajas. Pero no. Lo cierto es que estoy estresado. Después de Pelotas estuve como director de contenidos de El Terrat. Teníamos muchísimos proyectos y teníamos que ir aclarando el camino. Además, en este periodo hemos puesto en marcha otros muchos programas como Palomitas o Las noticias de las 2, que también te quitan mucho tiempo. Los proyectos que no triunfan también requieren tiempo.

¿Cómo se vivían esas mañanas en las que llegaba el correo con el índice de audiencia y veían que los programas no terminaban de cuajar?

Es un momento muy complicado. Y eso no se puede relativizar porque esos datos implican que haya gente que trabaje o que se quede en paro. Por suerte, no somos cirujanos y si fallamos en nuestro trabajo no va a morir nadie, sólo se pone en peligro la estabilidad de la productora. También te acaba saliendo un callo y aprendes a llevarlo. Pero tengo que decir que prefiero un plató o rodar una película a ese trabajo como director de contenidos y recibir ese mail.

'Hay algunas televisiones autonómicas innecesarias'

¿Está preparando alguna película nueva?

Sí. Pero el cine está como está y si antes te tirabas dos años intentando levantar una película, ahora te tiras tres o más. Y ahí estamos, con una película sin confirmar y me sabe mal explicar de qué va porque imagínate que al final la película se cae porque el euro ha bajado un poco más.

¿Una comedia?

Sí, es un proyecto en clave de comedia pero no quiero adelantar nada hasta que no se firme. Tal y como está el panorama hay que ser prudentes. Lo que sí puedo decir es que Juan [por Juan Cruz] y yo tenemos muchas ganas de rodar el año que viene.

Parece que el mundo del cine y de la televisión también tiene que apretarse el cinturón.

Bueno, hasta que esta crisis llegó parecía que un programa no podía funcionar sin un grandísimo presupuesto. Cuando estábamos en Antena 3 con el programa de Andreu Buenafuente éramos diez cómicos trabajando para un programa y aquello parecía una fiesta. Después, por la situación económica, el presupuesto fue descendiendo hasta llegar a un 25% de la partida inicial, y acabamos haciendo un programa más estilizado manteniendo nuestra apuesta por la imaginación, por el buen guión, y con la enorme suerte de tener dos grandes al frente como Andreu y Berto.

Se habla mucho de lo que escasea esa imaginación y el buen guión en la televisión actual.

No, la televisión no está tan mal como la pintan. Creo que, en realidad, cuando se habla de lo mal que está el medio se quiere hablar de lo mal que está la sociedad. Por ejemplo, en la frase: 'La televisión ha perdido el contenido y sólo apuesta por la forma', si sustituimos televisión por sociedad, la frase mantiene su significado. A mí la televisión me gusta como medio y veo mucha televisión pero elijo los contenidos que quiero ver, no me trago lo que echen. Creo que hay más de 25 programas que nadie me puede decir que son malos.

Usted trabajó muchos años en TV3. ¿Qué piensa del tijeretazo de Artur Mas?

La televisión catalana tiene el mismo problema que el resto de autonómicas. Y al final se entiende que si están recortando en sanidad y en educación, también hay que hacerlo en la televisión. Además, hay que valorar que ha habido algunos modelos de televisión pública autonómica que han creado televisiones completamente innecesarias. Así, también se han desarrollado muchos proyectos públicos innecesarios como aeropuertos o estaciones ferroviarias y ahora pienso: ¿de verdad que era necesario construir un aeropuerto aquí?