Amenazan con matar en 3 días al trabajador de la ONU secuestrado en Pakistán

El grupo separatista paquistaní que secuestró a principios de febrero al trabajador estadounidense de la ONU John Solecki ha amenazado con matarlo en tres días si no se cumplen sus exigencias, informó hoy a Efe una fuente del organismo multilateral.

El Frente Unido de Liberación de Baluchistán (FULB) "ha vuelto a fijar un ultimátum, aunque nuevamente lo ha hecho a través de los medios de comunicación. Estamos investigándolo y queremos establecer contacto directo con los secuestradores, algo que de momento ha sido imposible", explicó la portavoz de la ONU en el país, Maki Shinahar.

Un portavoz del FULB remitió anoche una carta a la agencia de noticias local "Online" en la que amenazaba con matar a Solecki si en un plazo de cuatro días las autoridades paquistaníes no excarcelan a 1.109 personas que se hallan bajo su custodia.

El FULB había solicitado días atrás la puesta en libertad de 141 mujeres baluchis y que se facilitase información sobre el paradero de unos 6.000 activistas.

Esta organización era desconocida hasta que reivindicó el pasado 2 de febrero la autoría del secuestro de Solecki, jefe de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en la ciudad de Quetta, capital de la provincia suroccidental de Baluchistán.

La semana pasada, circularon en la prensa durante varias horas rumores sobre el asesinato de Solecki, quien padece hipertensión y problemas renales, pero tanto la organización separatista como el Gobierno lo desmintieron.

"No hay nada que nos permita creer o no creer este ultimátum. Seguimos en una situación difícil. Pero obviamente estamos preocupados por la amenaza, no podemos ignorarla", admitió la portavoz de la ONU.

Una fuente de la embajada estadounidense en Islamabad consultada por Efe se limitó a asegurar que EEUU está trabajando con las autoridades paquistaníes para conseguir la liberación de Solecki, aunque rehusó hacer más declaraciones.

En la provincia de Baluchistán operan varios grupos nacionalistas armados que luchan desde hace décadas por la independencia o una mayor autonomía de la región.