El presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, no ha asistido a la reunión de la Junta Directiva Nacional que el PP celebra en Madrid ya que debe atender a diversos compromisos de agenda en Valencia.

La ausencia del presidente valenciano, uno de los aforados investigados por el juez Baltasar Garzón en el llamado caso Gürtel, no ha sido la única, ya que también se ha producido la del presidente electo de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, aunque por motivos diferentes.

El vencedor de las elecciones gallegas del pasado 1 de marzo está regresando de Uruguay, uno de los países sudamericanos que ha visitado durante los últimos días para reunirse con la colonia gallega residente allí.

Todos los demás altos cargos del PP asisten a la cuarta Junta Directiva Nacional que los conservadores celebran desde que arrancó la legislatura.

Este órgano del Partido Popular es el de mayor relevancia entre congresos nacionales.

Al de hoy, que por razones de asistencia tiene lugar en un hotel madrileño y no en la sede del PP como es habitual, asisten no sólo los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional y los diputados y senadores nacionales, sino también los parlamentarios autonómicos, invitados excepcionalmente al cónclave con el fin de favorecer la máxima movilización electoral ante los comicios europeos de junio.

Ese es precisamente el objetivo de la Junta Directiva de hoy: fomentar la participación en las elecciones para el Parlamento europeo del 7 de junio y obtener una victoria que sumar a la lograda en Galicia, lo que consolidaría el liderazgo de Mariano Rajoy.

Antes del comienzo, sólo habló a los medios de comunicación el presidente del PP en el País Vasco, Antonio Basagoiti, quien se ha limitado a decir que su partido, en las negociaciones que mantiene con el PSE-EE para un hipotético respaldo a Patxi López como lehendakari, pretende 'compromisos políticos'.