Más de 100 activistas y abogados fueron detenidos hoy por las fuerzas de seguridad durante una manifestación en Islamabad contra el dictamen judicial que permite al presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, concurrir a las elecciones sin abandonar el mando del Ejército.

Según el canal privado de televisión Geo Tv, los abogados y activistas estaban congregados cerca de la Comisión Electoral en Islamabad, que revisa hoy las candidaturas presentadas para las elecciones presidenciales del próximo día 6 de octubre.

Los abogados, que habían convocado una manifestación para hoy en protesta por la decisión del Tribunal Supremo de permitir a Musharraf mantener su puesto al frente del Estado y al Ejército, lanzaron piedras y botellas a la Policía, que respondió con porras y gases lacrimógenos.

Uno de los líderes de los abogados, Ali Ahmed Kurd, fue golpeado por las fuerzas de seguridad y más tarde arrestado junto a otros 100 participantes en la manifestación en la Avenida de la Constitución.

"La administración ha convertido la Avenida de la Constitución en un campo de batalla (...) Kurd ha sido llevado a un lugar desconocido", dijo a la prensa el presidente de la Asociación de Abogados del Tribunal Supremo, Munir A. Malik.

En referencia a sus compañeros detenidos, Malik aseguró que los arrestos "sólo fortalecerán" su resolución contra el "dictador militar". "No pararemos", añadió.

Por seis votos contra tres y alegando razones técnicas, un panel de la corte de apelación del Supremo había rechazado este viernes los seis recursos presentados contra el doble mando del general Musharraf.

El dictamen fue anunciado en una abarrotada sala del Alto Tribunal y, nada más conocerlo, numerosos activistas de la oposición comenzaron a protestar al grito de "vergüenza, vergüenza" y "vete Musharraf, vete".

Los abogados han encabezado en los últimos meses un movimiento de oposición contra Musharraf, a raíz del intento en marzo del dirigente de destituir al presidente del Supremo, Iftikhar Chaudhry, que luego fue restituido en el cargo por sus colegas de magistratura.

El camino de Musharraf parece despejado para renovar su mandato presidencial tras la decisión del Supremo, ya que el actual presidente cuenta con mayoría en las Cámaras.