El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, dijo el miércoles que uno de sus principales empeños es preservar los derechos sociales de los trabajadores en el contexto de crisis económica.

"Hacer que ningún trabajador en este país retroceda en las conquistas sociales que ha conseguido, esa sí es una tarea fundamentalmente del ministro de Trabajo", dijo Corbacho en una sesión plenaria en el Congreso de los Diputados.

José María Fidalgo, el secretario general de Comisiones Obreras, el sindicato mayoritario en España, dijo recientemente en una entrevista con Reuters que no dudaría en convocar a una huelga general para defender a los trabajadores contra eventuales recortes sociales.

Corbacho añadió en la Cámara Baja española que el Gobierno abordará todas las reformas que sean necesarias en el ámbito de su departamento dentro del marco del diálogo social.

Indicó que las mesas abiertas del diálogo social entre el Ejecutivo, los agentes sociales y la patronal constituyen el marco adecuado para analizar el tipo de reformas y el calendario apropiado.

"Haremos reformas, las que sean precisas, las que sean menester (...) y las haremos en el diálogo social", dijo Corbacho en una sesión plenaria en la Cámara Baja española.

"Estamos trabajando en ello, en el diálogo social y preservaremos el diálogo social", añadió.

Corbacho dijo que la mayor preocupación del Gobierno es el aumento del desempleo y añadió que la prioridad de su departamento es buscar soluciones en beneficio del mercado laboral y dar cobertura a los que pierdan su empleo.

España, que hasta hace algo más de un año era el país que generaba más empleo en la zona del euro, ahora destruye puestos de trabajo y aumenta el paro hasta rondar una cifra cercana a los tres millones de personas desempleadas en noviembre.

Entre las últimas medidas adoptadas por el Gobierno para paliar los efectos de la crisis económica en el mercado laboral español, el Gobierno puso a disposición de los entes locales y ayuntamientos 8.000 millones de euros.