La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, hará los cambios que considere oportunos cuando conozca las distintas áreas de su Departamento "con detalle" y asegura que sus ritmos "no son los de la política".

"Mis ritmos son quizá más los de un escritor que se toma un tiempo para reflexionar", asegura la nueva responsable de Cultura en una entrevista que publica hoy El País, en la que reconoce que le "preocupa" que en el sector del cine, del que procede, su nombramiento genere unas expectativas que se puedan ver defraudadas.

González-Sinde expresa su convencimiento de que la cultura "debería ser un territorio neutral y no de controversias" que debería situarse "por encima de los partidos políticos", y rechaza el calificativo de "pedigüeños" que en ocasiones se le ha dado al gremio del cine español.

Asimismo, la ministra resta importancia a la polémica sobre si el Instituto Cervantes debe depender de Cultura o Exteriores, al considerar que si estos órganos de promoción exterior están dotados "da igual" de quien dependan.

La responsable de Cultura considera que las medidas punitivas no son la solución a las "descargas" de cine o música por Internet, y asegura que de aquí al verano hablará con todos los interlocutores, incluidos los representantes de las asociaciones de internautas más críticas con su nombramiento.

Respecto a la posibilidad de que se reconsidere la salida de Nacho Duato de la Compañía Nacional de Danza en 2010, la ministra asegura que se sentará con él y hablará; "me gustaría escucharle y ver cuáles son sus propuestas".