Google va a comprar la empresa Global IP Solutions, que cotiza en la bolsa de Oslo, por 68 millones de dólares (unos 53 millones de euros), para reconstruir sus servicios de audio y vídeo a través de Internet en tiempo real, según anunciaron ambas empresas el martes en un comunicado.

La oferta amistosa, toda en efectivo, valora las acciones de GIPS en 13 coronas noruegas (1,65 euros) cada una, un 27,5 por ciento más de u precio de cierre del viernes a 10,20 coronas. Los mercados noruegos estaban cerrados el lunes.

"La Red está evolucionando rápidamente como una plataforma de desarrollo, y la comunicación en vídeo y audio en tiempo real a través de Internet se están convirtiendo en nuevas herramientas importantes para los usuarios", comentó en un comunicado el director de ingeniería de Google, Rian Liebenberg.

El consejo de GIPS recomendó a los accionistas que acepten la oferta, y los accionistas que suponen en torno a la mitad de las acciones y votos de la compañía, incluyendo Kistefos Venture Capital AS y Kistefos Venture Capital II DA, se han "comprometido de forma irrevocable a aceptar la oferta", indicó Google.

"Hay una buena lógica industrial para el acuerdo basada en los redoblados esfuerzos de Google en comunicación sobre sus soluciones web", indicó a Reuters el líder del consejo de GIPS y consejero delegado de Kistefos Venture Capital, Ditlev de Vibe. "El precio ofrecido por Google es muy bueno y el consejo puede recomendarlo con seguridad".

Global IP Solutions tiene su sede en San Francisco pero cotiza en la bolsa de Oslo, y dice ser líder en tecnología de procesamiento de voz y vídeo para redes IP, con software en "más de 800 millones de puntos finales".

GIPS permite a los proveedores de servicios, desarrolladores y creadores de software reducir problemas en las redes como el retraso, los saltos o el eco en aplicaciones de vídeo y audio en tiempo real.

La oferta supone un extra del 54,6 por ciento frente al volumen de mercado medio ajustado de la firma en los últimos tres meses, según Google.

La totalidad de la oferta se financiará con los recursos existentes de efectivo del comprador, y "actualmente no se espera que (la operación) requiera aprobación" de ningún organismo antimonopolio, añadió la empresa.

Para completarse, la compra está sujeta a la aprobación de los propietarios del 90 por cientos de las acciones de GIPS o a una renuncia a la solicitud de Google.