El Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) ha confirmado que Juana Carmona L., asesinada presuntamente por su marido, un policía local de Albox (Almería) de baja por depresión crónica aguda, no había interpuesto denuncia alguna contra el hombre, con el que mantenía una relación aparentemente normal.

En rueda de prensa en Almería, la coordinadora provincial del IAM, Adela Segura, ha asegurado que los allegados al matrimonio, así como los responsables políticos y técnicos de este municipio almeriense, "desconocían la existencia de la más mínima relación de violencia" entre ambos.

Tras lamentar que Joaquín Jiménez A., de 61 años, haya "truncado desgraciadamente" la vida de su mujer, a la que ha disparado al menos en una ocasión con una escopeta de caza con la que, acto seguido, se ha quitado la vida, ha criticado la carencia de mecanismos para evitar que el hombre, de baja por depresión, dispusiera de un arma de fuego.

Segura ha señalado que, conforme avancen las investigaciones policiales sobre el suceso, se convocará una concentración en la capital almeriense en repulsa a la primera muerte por violencia machista que se ha producido en la provincia en lo que va de año.

También aguardará al resultado de las investigaciones emprendidas por la Guardia Civil el equipo de Gobierno de Albox que, por el momento, no ha decretado ningún tipo de acto por la muerte "tan sorpresiva" de un matrimonio "normal, estable, muy participativo en los quehaceres del pueblo y conocido por todo el mundo", ha dicho a Efe José García Navarro, alcalde de la localidad.

El alcalde, que conocía personalmente al matrimonio, ha señalado que el presunto asesino de su mujer, agente de la Policía Local desde hace más de 30 años, se encontraba de baja laboral desde hace un año y medio por una depresión crónica aguda que se habría agravado en las últimas semanas, a pesar de estar el hombre bajo el tratamiento de especialistas del servicio de Salud Mental de Albox.

A este estado que padecía el agente ha achacado el alcalde lo ocurrido esta madrugada en el garaje del domicilio familiar, donde el matrimonio, con un hijo varón ya emancipado, residía junto a una hija que iba a contraer matrimonio.