Una pareja argentina denuncia a España por trato discriminatorio

Una pareja de argentinos se ha querellado judicialmente contra el Estado español, al que reclama 1,5 millones de pesos (unos 473.000 dólares) por discriminación, ya que, según afirman, las autoridades del aeropuerto de Barcelona los detuvieron, les prohibieron el acceso y les trataron de "sudacas".

Los denunciantes, identificados como Walter y María Silvia, son bailarines de ballet y viajaron a España en noviembre para asistir a una boda familiar cuando fueron detenidos por la policía en el aeropuerto.

A los argentinos les dijeron que "no tenían profesión alguna, ni medios de vida, ni lugar para alojarse en España, así como tampoco dinero para retornar al país", explicó hoy el abogado de la pareja, Alejandro Severín.

El letrado indicó que la demanda está dirigida al Estado español y a los cuatro policías que, según la pareja, les retuvo durante dos días sin atender a sus explicaciones sobre los motivos del viaje.

Durante ese tiempo les aseguraron que en España hay una política de impedir a "ciertas etnias que respondan a ciertas características fisonómicas" que ingresen en Europa, además de llamarles "sudacas" y "negritos" en repetidas ocasiones "como si fueran invasores", dijo.

Los argumentos de la policía, según los denunciantes, eran que los argentinos no tenían alojamiento, itinerario turístico ni dinero en efectivo, agregó el abogado.

Explicó que efectivamente no tenían hotel, pero que tenían previsto quedarse en casa de un familiar, que podían demostrar que iban a una boda y se quedaban sólo una semana y que, a pesar de tener sólo 200 pesos (unos 63 dólares) en efectivo, disponían de tarjetas de crédito, además de poseer pasaje de regreso.

Según Severín, también les retuvieron su documentación, que no recuperaron hasta volver a Argentina, y estuvieron detenidos "en condiciones infrahumanas".

La pareja afirma tener imágenes tomadas con teléfonos móviles que demuestran que los retuvieron "en una habitación cerrada con puertas de chapa, con colchones con sangre y sin ningún tipo de higiene", agregó.