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El Parlamento alemán ratifica el pacto fiscal propuesto por Merkel

La canciller alemana insiste en que habrá 'condicionalidad' a la ayuda prestada por la UE a los bancos españoles.

EFE

La canciller alemana, Angela Merkel, ha enviado esta madrugada a Europa su buscada 'señal' al lograr la ratificación alemana del pacto fiscal y del fondo de rescate permanente, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), horas después de la cumbre europea que ha modificado este último en beneficio de España. La jefa del Gobierno alemán ha obtenido el mayoritario respaldo del Bundestag (Parlamento) y el Bundesrat (Senado) a ambas medidas, pese al desgaste político que este proceso le ha supuesto dentro y fuera de su país en los últimos días, caracterizado por sus cesiones.

En el Bundestag 491 votaron a favor del pacto fiscal, 111 en contra y 6 diputados se abstuvieron, y 493 votaron a favor del MEDE, 106 en contra y 5 se abstuvieron; mientras que en el Bundesrat, 65 de sus 69 miembros apoyaron ambos mecanismos. Los resultados en ambas cámaras son claramente superiores al mínimo que Merkel precisaba para sacar adelante las medidas, aunque quedaron marcados por los disidentes dentro de la coalición de gobierno de centro-derecha que votaron en contra. Las mayorías se trabaron gracias a las negociaciones que el Gobierno llevó a cabo la semana pasada con los mayores partidos de la oposición y con los estados federados para que, a cambio de concesiones políticas en el primer caso y financieras en el segundo, ratificasen estas medidas en el Bundestag y Bundesrat, respectivamente.

En su intervención previa a la votación en la cámara baja, la canciller recalcó que el pacto fiscal y el MEDE son la 'unión legal' de 'solidez' presupuestaria y 'solidaridad' interestatal propia de la UE y, por tanto, 'un nuevo paso hacia la integración en el seno de la Unión Económica y Monetaria' (UEM). Argumentó que con la ratificación de Alemania -la primera economía de la UE y, por tanto, el mayor contribuyente a los fondos de rescate- se envía una 'importante señal 'hacia dentro y hacia fuera' sobre la determinación de Berlín para superar la crisis de la eurozona. Asimismo, añadió que el pacto fiscal 'transforma la UE en una unión de estabilidad' y que el fondo permanente de rescate se empleará para 'desactivar peligros futuros', pero sólo para 'aquellos países que ratifiquen el pacto fiscal' y se comprometan legalmente con la consolidación presupuestaria.

La canciller aprovechó para explicar los acuerdos adoptados esta madrugada en Bruselas y su posición, después de que la cumbre europea diese luz verde a la recapitalización directa de la banca española y a la compra de deuda por parte de los fondos de rescate, dos opciones a las que Merkel se oponía frontalmente hasta ayer. La oposición le criticó ampliamente por este súbito cambio de postura, pero también por haberse opuesto radicalmente a estas medidas hasta ahora, posponiendo la recuperación de la UE y, en especial, de los países más afectados por la crisis. Además, le afearon que se haya ratificado en el Legislativo alemán el MEDE una vez que en Bruselas ya se ha acordado su modificación, lo que abre un interrogante sobre esta votación.

En este sentido, Merkel reconoció que 'los cambios' negociados ayer en el Consejo Europeo tendrán que volver a ser refrendadas por ambas cámaras alemanas. Con respecto a España, indicó que la petición de Madrid al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) se traspasará al MEDE sin modificar las condiciones pactadas y sin bonos preferenciales, algo que estaba disparando la primera de riesgo española. Explicó, asimismo, que habrá 'condicionalidad', que quedará plasmada en el memorando de entendimiento que negocian Madrid y Bruselas, y agregó que el 'cumplimiento' de estas condiciones será 'supervisado'.

Por último, Merkel ahondó en el plan de crecimiento lanzado por el presidente francés, François Hollande, y en los pasos dados hacia la unión bancaria, y en la propuesta de dotar al Banco Central Europeo (BCE) de autoridad para supervisar a las entidades financieras de la eurozona. La ratificación de ambas medidas debe ahora ser firmada por el presidente alemán, Joachim Gauck, un proceso que se ha detenido por la presentación de varios recursos de inconstitucionalidad.

Poco después de la ratificación del pacto fiscal y el fondo de rescate permanente (MEDE), llegaban al Tribunal Constitucional (TC) las primeras apelaciones a la misma. El recurso de inconstitucionalidad presentado por la Izquierda fue enviado por fax a Karlsruhe, sede del TC, al poco de concluir la votación en el Bundesrat, señaló hoy un portavoz del grupo parlamentario de este partido, formado por poscomunistas y disidentes socialdemócratas. 'Confío que el Tribunal Constitucional escuche nuestros argumentos', señaló la copresidenta de La Izquierda, Katja Kipping, en declaraciones al rotativo 'Leipziger Volkszeitung'.

Agregó que el objetivo de su formación, que considera que el pacto fiscal transgrede la carta magna alemana, es la celebración de un plebiscito, para lo que se mostró esperanzada de una señal favorable desde Karlsruhe. 'También una victoria parcial sería un signo importante. El Tribunal Constitucional puede enviar una señal a los políticos de que en leyes tan amplias debe decidir el pueblo', subrayó.

Otro recurso fue presentado por el diputado socialcristiano Peter Gauweiler, quien señaló en un comunicado que el pacto fiscal y el MEDE 'atentan de forma grave contra el principio de democracia' al traspasar fondos públicos a una 'organización no legitimada democráticamente', llegaba hacia la medianoche a las puertas del tribunal.

Y un tercero lo presentó la asociación 'Más democracia', que suma unos 12.000 ciudadanos y está representada por la socialdemócrata y exministra de Justicia Herta Däubler-Gmelin y el experto en derecho constitucional Christoph Degenhart. 'Protestamos contra los acuerdos, porque constituyen una doble restricción de la democracia. Por un lado se entregan de manera irrecuperable competencias presupuestarias y derechos soberanos del Bundestag a Bruselas', señaló Däumler-Gmelin. Por otro lado, esta ratificación se está llevando a cabo con absoluta precipitación y sin tener en cuanta la opinión de los ciudadanos, agregó. La ratificación alemana queda así en suspenso hasta la decisión del Tribunal Constitucional, por lo que el MEDE no podrá entrar todavía en vigor mañana, tal y como estaba previsto.

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