Arropado por algunos de sus principales "barones", el líder del PP, Mariano Rajoy, ha defendido hoy su actitud asegurando que da la cara al optar a la reelección y ha lanzado dos retos: quien quiera presentar otra candidatura que lo haga y si alguien se quiere ir al partido liberal o al conservador, que se vaya.

En su intervención en un acto organizado por el PP en Elche, en el que ha criticado duramente al Gobierno por su política sobre el agua, ha dedicado una serie de reflexiones al momento que vive su partido en los prolegómenos del XVI Congreso Nacional y ante la expectativa de que alguien, como Esperanza Aguirre, le dispute la presidencia "popular".

Pero en ningún momento se ha referido de forma explícita a la presidenta madrileña, aunque sí ha hablado de Madrid para decir que, tras su experiencia en provincias, él cree en Madrid, "pero no se pueden confundir veinticinco personas de Madrid con España, porque España es mucho más grande e importante".

Ha proclamado su lealtad al PP, ha asegurado que se presenta a la reelección porque se lo han pedido sus compañeros, no porque lo haya hecho "ningún periódico ni ninguna radio", y ha mostrado su absoluta oposición a la existencia de un partido de "doctrinarios".

Rajoy está de acuerdo, como ha pedido Aguirre, en que haya un debate de ideas, pero ha puntualizado que ese debate ya ha existido en los últimos años en el seno de un partido en el que está convencido de que caben liberales, democristianos y socialdemócratas, un colectivo este último al que esta semana se refirió la presidenta madrileña para hablar de sus preferencias para liderar el PP.

Él desea que todo el mundo se sienta cómodo en el PP y, por tanto, que el partido no responda a una sola ideología.

"Quiero estar donde estamos, en el Partido Popular Europeo, en el grupo popular del Parlamento Europeo, teniendo como socios a Merkel y Sarkozy, y si alguien se quiere ir al partido liberal o al conservador -ha señalado-, que se vaya".

Antes de su intervención, Rajoy había escuchado una retahíla de halagos por parte del presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps; del de la región murciana, Ramón Luis Valcárcel; y de los presidentes del PP en Andalucía y Cataluña, Javier Arenas y Daniel Sirera, respectivamente.

"España necesita a Mariano Rajoy", ha sido una de las frases de Camps, quien se ha mostrado convencido de que el actual líder del PP conseguirá el respaldo mayoritario de los compromisarios del partido en la Comunidad Valenciana

Total respaldo obtuvo también de Valcárcel, quien cree que el liderazgo de Rajoy (al que ha calificado de "transparente, limpio, honesto y coherente") es necesario para el PP y para España.

Sirera ha garantizado que todo el partido va a estar con Rajoy para acompañarle hasta la Moncloa, y Arenas ha asegurado que comparte al cien por cien su proyecto y no va a dedicar ni tiempo ni saliva a responder a otros compañeros de partido.

Si todos ellos han coincidido en el respaldo a Rajoy también lo han hecho al criticar la solución del Gobierno para hacer frente a los problemas de agua en Barcelona.

El presidente del PP ha anunciado que su primera pregunta al jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el pleno del Congreso, será sobre el agua, y le ha pedido que tenga el coraje de reconocer su error en materia de trasvases.

Además, ha reclamado transferencias hídricas similares a Cataluña para la Comunidad Valenciana y Murcia y ha tildado de "burla" la política del PSOE en materia de agua.

Las medidas económicas aprobadas ayer por el Consejo de Ministros para hacer frente a la desaceleración han sido calificadas por Rajoy de "insuficientes" y "timoratas".

Las críticas a la política económica y sobre el agua han sido la muestra de que, como él mismo ha dicho, va a empezar a decir ya a Zapatero que no está haciendo bien las cosas.

Pero no sólo no le agradan los hechos. Tampoco las personas del nuevo Gobierno, ya que ha dicho que no le gusta porque no ha cambiado el núcleo, "liquida" el Ministerio de Medio Ambiente, sólo cesa a tres ministros y mantiene a Mariano Fernández Bermejo y Magdalena Alvarez.