El Gobierno de facto de Honduras dijo el viernes que sólo permitirá que el depuesto presidente Manuel Zelaya salga del país bajo el estatus de asilado político y descartó concederle una amnistía por los cargos que hay en su contra.

Aunque el presidente de República Dominicana, Leonel Fernández, aseguró que Zelaya viajaría a su país el domingo para buscar una salida a la crisis que divide a Honduras, el Gobierno de facto dijo que no recibió solicitud alguna y que él sólo podría partir con el estatus que ellos exigen.

"No hay ninguna solicitud de ningún gobierno de salvoconducto para el ex presidente Zelaya", dijo a Reuters el portavoz del Gobierno de facto René Zepeda, preguntado por las declaraciones del mandatario Fernández.

Zelaya, refugiado desde hace casi tres meses en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, había intentado partir el miércoles hacia México desde la sede diplomática, pero su intento fracasó por desacuerdos con el Gobierno del presidente de facto Roberto Micheletti sobre los términos.

"La única forma en la que él puede salir del país es que un país le otorgue asilo político", indicó Zepeda.

El depuesto mandatario fue sacado del poder el 28 de junio y llevado a Costa Rica, pero regresó secretamente al país el 21 de septiembre. Desde entonces, está refugiado en la sede diplomática de Brasil.

Zelaya tiene órdenes de arresto en su contra por violar supuestamente la Constitución al tratar de realizar una consulta popular que abriera paso a la reelección y buscaba salir del país bajo la categoría de "huésped distinguido".

Pero el Gobierno de Micheletti sólo accedió a darle un salvoconducto para que viajara como asilado, algo que el depuesto líder rechazó.

La comunidad internacional ha reclamado sin éxito la restitución de Zelaya e incluso países que han reconocido las elecciones del 29 de noviembre, como Estados Unidos, aseguran que antes de que asuma el próximo presidente electo, Porfirio Lobo, es necesario restaurar el orden constitucional.

El presidente dominicano sostuvo el viernes en una conferencia de prensa que Zelaya y Lobo se reunirían en la isla para buscar una solución a la crisis con su mediación.

Incluso detalló que el derrocado mandatario llegaría el domingo y Lobo el lunes, pero no aclaró si Zelaya viajaría con estatus de asilado político.

El entorno de Zelaya no quiso confirmar si el depuesto presidente viajaría a República Dominicana ni si había negociaciones para ello con el Gobierno de facto.