Cada 17 de mayo se celebra el Día del Reciclaje, con la finalidad de concienciar al mundo sobre la necesidad e importancia de reciclar para proteger el medio ambiente y prevenir y combatir los efectos del cambio climático. Todo ello va ligado a un consumo responsable y a los pequeños gestos que cada uno de nosotros puede hacer para conseguirlo.
Aprovechando la ocasión, y para que todos pongamos nuestro granito de arena, repasamos media docena de cosas que puede que no sepas dónde reciclar. Seguro que, como a nosotros, más de una vez te ha surgido la duda con alguna de ellas. Toma nota para que no tengas que volver a preguntarte ¿en qué contenedor lo echo?
Bombillas
Entre los objetos más contaminantes que tenemos en casa si no lo desechamos adecuadamente para que sea reciclado se encuentran las bombillas. Tampoco es algo que se cambie con demasiada frecuencia, así que también puede pasar que cada vez que vayas a cambiar una tengas que consultar dónde se tiraban.
Para que no tengas dudas debes tener en cuenta una cosa: las bombillas jamás se tiran en el contenedor verde, en el que sí van las botellas y recipientes de vidrio. Pero las bombillas tienen una composición más compleja.
Las bombillas LED, de descarga, de bajo consumo y las fluorescentes se deben llevar a un punto limpio o tirarlas en los puestos de reciclaje habilitados para ello que suele haber en los establecimientos que las venden. Esto es así porque están consideradas como residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE).
Cartón de la pizza
La caja de cartón de la pizza que pedimos a domicilio suele generar muchas dudas a la hora de tirarlo al contenedor. Si es cartón, ¿debe tirarse en el azul destinado al papel? La respuesta es sencilla: no. Debes recordar que los envases y cartones, aunque sean de papel, cuando tienen grasas y restos de comida se deben desechar en el de materia orgánica, es decir, el contenedor gris.
Esto es así porque las plantas de tratamiento de papel no pueden recuperar ni reciclar el papel manchado de grasas y aceite. Solo en el supuesto de que las cajas o envases de papel y cartón de la comida estén limpios podrás tirarlos al contenedor azul.
Juguetes infantiles
¿Y qué sucede con los juguetes viejos o rotos de los niños? Aquí tienes varias opciones. Si hablamos de juguetes en buen estado, una estupenda opción es donarlos a alguna ONG o regalarlos durante una campaña de recogida de juguetes de las que suelen ponerse en marcha durante las fechas navideñas.
Pero si se trata de juguetes en mal estado, aunque muchos de ellos te parezca que están fabricados en plástico, nunca deberás tirarlos en el contenedor amarillo, puesto que su composición es diferente a los envases que sí se tiran en este. Además, muchas veces incluyen otro tipo de materiales, como pueden ser eléctricos o metálicos, por lo que deben ser separados para poder reciclar y aprovechar sus componentes. Por tal motivo, los juguetes deteriorados, rotos o desgastados deberás desecharlos en un punto limpio.
Tapas de los tarros
Todos tenemos claro que los botes y tarros de vidrio deben arrojarse en el contenedor verde, así como el resto de botellas y envases en este material. Sin embargo, tenemos que recordar que es necesario quitar las tapas de los tarros y los tapones de las botellas antes de tirarlos, porque son de otros materiales. De tal modo, las tapas de metal o plástico, así como los tapones de refrescos, zumos y cartones de leche, por ejemplo, han de arrojarse al contenedor amarillo.
Gafas
Las gafas viejas pueden ir acumulándose en un cajón año tras año, sobre todo, si además de gafas de sol usas gafas graduadas, así que antes o después llega el momento de tirarlas. Pero ¿dónde hacerlo?
Nuestra opción favorita es donarlas. Hay ópticas y ONGs que organizan campañas de recogida de gafas usadas para donarlas a aquellos que las necesitan en otras partes del mundo. De igual modo, las ópticas suelen contar con un sistema de recogida para reciclarlas adecuadamente, por lo que puedes preguntar donde las compras normalmente o, en última opción, entregarlas en el punto limpio de tu municipio.
En cualquier caso, nunca las tires ni en el contenedor de vidrio ni en el naranja ni en el gris, y recuerda que esas gafas que tú ya no pones pueden servir para proteger los ojos del sol o para poder ver correctamente a personas que sí las necesitan y no tienen forma de adquirirlas.
Tapones de corcho
Así como los tapones de plástico de las botellas y tetrabriks van al contenedor amarillo, ¿qué hemos de hacer con los tapones de corcho natural de las botellas de sidra o de vino? La respuesta es sencilla. Al fin y al cabo, el corcho es un elemento natural compuesto de material orgánico, ya que procede de la corteza de los alcornoques. Por ello, es necesario depositarlos en el contenedor de restos orgánicos.
