Veinticinco años dando 'cabezones'

El 16 de marzo de 1987 el cine Lope de Vega de Madrid acogía la primera edición de los Goya. Un vistazo al archivo de la gala da para un viaje en el tiempo: Imperio Argentina, Antonio Ferrandis, Imanol Arias, José Luis López Vázquez, Amparo Rivelles, Esperanza Roy, Juan Luis Galiardo, Irene Gutiérrez Caba, Juan Antonio Bardem, María Asquerino, Cristina Hoyos... Además de los reyes, allí estuvieron el entonces ministro de Cultura, Javier Solana, y, claro, el primer presidente de la Academia, José María González Sinde, padre de la actual ministra Ángeles González Sinde.

Según recoge ahora la Academia, con motivo de este 25 cumpleaños, en un programa de mano se daban las gracias a "todos aquellos que han contribuido a que el oficio de cineasta empiece a ser seriamente considerado", firmado por Luis García Berlanga, presidente de honor de la institución. Entonces los Goya contaban con 17 categorías: hoy son 28, más el Goya de Honor (que este año es para el director Mario Camus).

Los diferentes presidentes han ido cambiando sus palabras, ya fuera mediante programas de mano o a través del ya clásico discurso. En 1988, José María González Sinde no podía más que mirar al futuro: "El pasado año, un periodista titulaba su crónica sobre nuestra primera entrega de premios: El nacimiento de una tradición. Que Dios le oiga". Un año después, Antonio Giménez-Rico apelaba a la modestia ("no somos un pueblo especialmente dotado para este tipo de shows") y a la oportunidad para "vernos, acercarnos, defendernos si fuera necesario". También en la unión para la defensa de intereses hizo parada en su discurso Fernando Rey en 1994.

En 1997, José Luis Borau subrayaba la apropiación del lenguaje de la calle, con expresiones como: "A ver si crees que te van a dar un Goya por eso". Y con Marisa Paredes, en 2002, llegó el compromiso: "Así que haremos nuestra la frase favorita de Cela: el que resiste, gana. Me gusta pensar que el cine español es el cine de la resistencia". Finalmente, el año pasado, Álex de la Iglesia hizo de la humildad su sello: "Tenemos que convencer a la sociedad de que también puede estar orgullosa de nosotros".

25 años que dan para acumular anécdotas y cifras. Alejandro Amenábar ha sido el profesional más premiado, con nueve cabezones, mientras que Victoria Abril y Juan Diego han sido los actores con más candidaturas (9 y 8; de los que se han llevado 1 y 3 respectivamente). Días contados (1994) y Pedro Almodóvar han sido la película y director que han aspirado a más estatuillas (8 y 7).

Por cierto, que el cabezón de Goya también ha pasado épocas. En las primeras tres ediciones, se trataba de una escultura de casi 15 kilos, con un mecanismo que hacía que de su interior saliera "una especie de peineta con forma de cámara de cine". A partir de 1990 se sustituyó por una versión light, de 3 kilos.