Andaba el partido en los bajos fondos para España, en una peligrosa dinámica de inferioridades castigadas con los goles de Alemania (18-21, m. 47), cuando a los de Valero se les activó el chip del carácter.

El balonmano se asoció entonces a la adrenalina para despejar el futuro en el Mundial. En siete minutos, España sumó sensaciones a lo numérico. Certificó su clasificación para la segunda ronda gracias a un molde de integridad defensiva -clave fue la aportación de Parrondo en el avanzado- con una inusitada fluidez en ataque.

La velocidad que imprimieron los de Valero Rivera en las transiciones con goles en primera oleada y las soluciones que aportó Aguinagalde desde el pivote certificaron un triunfo para una selección bipolar.

El trazo final invita a un mañana con buen sabor. A esa semifinal que es el techo al que aspira el grupo de Valero. Hasta el arreón de integridad, la Roja caminó en ese déficit de circulación que desprotege sus ambiciones. Hasta que apareció Alberto Entrerríos (minuto 5), la primera línea española acumulaba hastío.

Sólo los goles de Iker Romero desde los siete metros (anotó cinco de seis lanzamientos), y la velocidad de Rocas, Juanín o Parrondo mantenían a España en el goteo. Los alemanes, con un Bitter que cegaba a Gurbindo, Cañellas y Raúl Entrerríos, enseñaban un poderío que quedó diluido tras el tiempo muerto de Valero (18-21, reflejaba el marcador). 'Tenemos que ganar como sea', obligó a los suyos. Así apareció el mañana.

España: Sterbik; Rocas (3), Gurbindo (3), Garabaya (-), Viran Morros (-), Cañellas (1) y Juanín García (5, 1p) -siete inicial-. Hombrados (ps), Roberto García (1), Maqueda (-), Raúl Entrerríos (1), Chema Rodríguez (-), Alberto Entrerríos (2), Romero (5p), Ugalde (-) y Aguinagalde (5)

Alemania: Bitter; Sprenger (3), Glandorf (4), Haass (2), Hens (2), Gensheimer (4) y Preiss (1) -siete inicial-. Heinevetter (ps), Pfahl (2), Kraus (2p), Christophersen (-), Kaufmann (-), Klein (2), Roggisch (-) y Heinl (2).

Árbitros: Olesen y Pedersen (Dinamarca). Expulsaron por tres exclusiones a los jugadores alemanes Kaufmann (m. 34) y Preiss (m. 40). Además excluyeron por dos minutos a Cañellas (2), Chema Rodríguez, Juanín García, Garabaya, Raúl Entrerríos y Viran Morros por España; y a Haass (2), Preiss (2) y Roggisch por Alemania.

Kristianstad Arena (Suecia): 3.500 espectadores.