Es la hora de la verdad, el partido que en las últimas temporadas concentra las frustraciones del Madrid. Los blancos vuelven a los octavos de final de la Liga de Campeones. Esta vez, como ya pasara el año anterior, será contra el Lyon. Mourinho, dos veces campeón de la competición, llegó al banquillo blanco por días como el de este miércoles. El luso, como estrategia, quiere quitarle peso al pasado reciente del equipo: 'Yo he tenido resultados buenos en Champions, pero eso no juega a mi favor, ni los malos resultados del Madrid juegan en nuestra contra. Son partidos únicos y completamente aislados de los años anteriores'. Puel, entrenador del Olympique de Lyon, está de acuerdo: 'No contamos con lo hecho anteriormente, no importan las estadísticas'.

El Madrid necesita ganar en una competición que considera suya. La línea entre el deseo y la obsesión es mínima, pero Mourinho pretende marcarla con fuego. 'Si el Madrid, que ha ganado nueve veces, está obsesionado, imaginen cómo estarán los que no han ganado nunca. Es el campeón de los campeones y la décima llegará como consecuencia del trabajo serio, organizado y bien hecho. Con naturalidad, no con obsesión. El año pasado con el Inter teníamos ilusión y jugamos contra un equipo que estaba obsesionado con llegar a la final de Madrid, pero pasó el equipo ilusionado, no el obsesionado', dijo en referencia al Barcelona. Poco después ahondó más en la, según él, falta de necesidad del Madrid: 'Tenemos que luchar para conseguirlo, pero si no ganamos este año, lo haremos el próximo. No es grave. Grave es lo de Japón'.

Un nombre destaca sobre todos en ese intento de cambiar la historia: Cristiano. El técnico habló antes del entrenamiento, cuando aún no había una decisión oficial tomada sobre su concurso. 'No soy el doctor ni el jugador, necesito una opinión final del departamento médico y de las sensaciones de Cristiano. Si está bien, juega', comentó. El portugués entró en la convocatoria, y será del once. Pedro León, Gago, Kaká e Higuaín que ayer volvió a entrenarse, todos ellos lesionados, se quedaron fuera. El canterano Juan Carlos, que debutó contra el Deportivo, fue la novedad de la convocatoria.

Para hablar del planteamiento, Mourinho utilizó en varias ocasiones las palabras de Aulas, el presidente del Lyon, en las que aseguraba que el Madrid saldrá a la defensiva. 'Según él jugaremos para el 0-0, con eso nos clasificamos. Llegamos, nos metemos atrás, esperamos que Casillas saque mucho y duro y estaremos clasificados. Aulas me deja dudas, ha hablado como entrenador, no como presidente, pero a lo mejor tiene razón, nos cerramos atrás y jugamos al 0-0', aseguró Mourinho.

A diferencia de las últimas temporadas, el Madrid hoy parte con un 1-1 favorable de la ida. 'Es la primera vez que el Lyon juega aquí sin tener ventaja. La última temporada llegamos con el 1-0 y acabó empate. Ellos nunca han estado por detrás. Será un partido diferente. Nosotros estamos clasificados y tienen que jugar de otro modo', comentó Mou antes de mentar de nuevo las predicciones de Aulas: 'Jugaremos a esperar, como él dijo'.

El único tema en el que Mou no quiso explayarse fue el dopaje. Al ser preguntado si duda de la limpieza del fútbol español y si apoyaría al Madrid en una petición de más controles, contestó seco: 'No entiendo lo que dices, no quiero entender y tengo rabia de los que entienden'.