Público
Público

Credit Suisse, el símbolo de 167 años de historia que se fue a pique en dos décadas

Absorbido a precio de saldo por su principal competidor, el segundo banco suizo fue perdiendo la confianza a base escándalos, evasiones fiscales, blanqueo de capitales y malas decisiones de inversión.

Una sucursal del banco Credit Suisse en Reino Unido.
Una sucursal del banco Credit Suisse en Reino Unido. Yui Mok / DPA/europa press

Credit Suisse, 167 tormentosos años de un símbolo de las finanzas suizas
Ginebra, 19 mar (EFE).- Credit Suisse era el segundo mayor banco de Suiza por volumen de mercado. Hasta este domingo. Su principal competidor, UBS, el primer banco del país, ha anunciado su absorción por unos 2.000 millones de euros, apenas un tercio del valor de Credit Suisse en su última capitalización en bolsa.

Esta operación llamada a salvar el sistema financiero suizo y a amortiguar un duro golpe en todos los mercados internacionales ha puesto punto y final a un entidad insigne, con 167 años de historia, pero que se ha derrumbado en solo cinco años fruto de su peor crisis.

Ésta es la cronología del banco con sede en Zúrich, enfocada especialmente en sus últimos años:

1856: Alfred Escher funda el banco, entonces con el nombre alemán de Schweizerische Kredtanstalt (SKA), ideado principalmente para financiar el desarrollo de la inexistente red de ferrocarriles de Suiza.

2008: Credit Suisse, como muchos otros bancos globales, se ve golpeado por la crisis financiera derivada de las hipotecas subprime en Estados Unidos. Para la entidad supone un coste de 10.000 millones de francos, una cifra cuatro veces menor que la de UBS, que a diferencia del primero tuvo que ser rescatado por las autoridades financieras suizas.

2011: Llega a la presidencia de Credit Suisse Urs Rohner, un polémico ejecutivo que ocuparía la principal posición del banco hasta 2021. Muchos le consideran responsable de que la entidad perdiera durante su mandato más del 70% de su valor en Bolsa, e invirtiera en activos a la postre tóxicos como las colapsadas entidades financieras Archegos y Greensill, que le han abocado a dos años de pérdidas.

2014: Credit Suisse se ve obligada a pagar a las autoridades estadounidenses 2.600 millones de dólares tras ser acusada de evasión fiscal. Años antes, en 2009, fue multada con 536 millones de dólares por violar las sanciones estadounidenses contra Irán y Sudán entre 1995 y 2006.

2016: El banco se ve involucrado en un escándalo por corrupción en Mozambique, que le fuerza a pagar multas de 475 millones de dólares a las autoridades británicas y estadounidenses.

2018: Un gerente de grandes fortunas de Credit Suisse es condenado a prisión por causar pérdidas por valor de 150 millones de dólares al ex primer minitsro georgiano Bidzina Ivanishvili, malversando además 32 millones de dólares en las operaciones.

2018: El regulador del mercado de valores suizo, la Finma, detecta un caso de falta de diligencia debida en Credit Suisse a la hora de luchar contra el blanqueo de dinero a la hora de mantener negocios contra la petrolera estatal venezolana PDVSA, la brasileña Betrobras e incluso con la FIFA.

2019: Estalla un escándalo al descubrirse que Credit Suisse había espiado a algunos de sus empleados y exempleados (algunos de ellos al ser contratados por la competencia). La controversia fuerza en 2020 la marcha del consejero delegado Tidjane Thiam. Es sustituido por Thomas Gottstein.

2020: Nuevas acusaciones de las autoridades suizas por su relación con un caso de blanqueo relacionado con mafias del narcotráfico de Bulgaria, lo que le vale a Credit Suisse una multa de 2,1 millones de dólares.

2021: Los colapsos de Greensill y Archegos afectan gravemente a las cuentas de Credit Suisse, qude ebe suspender fondos del primero por valor de 10.000 millones de dólares y sufre pérdidas de 5.000 millones de dólares por el segundo.

2022: A principios de este año, el presidente del banco, Antonio Horta-Osorio, dimite por haberse saltado la cuarentena durante la pandemia y es reemplazado por Alex Lehmann. En agosto Gottstein es sustituido como consejero delegado por Ulrich Körner. En octubre, el banco anuncia un plan de reestructuración que implica un recorte del 15 % en sus gastos, el despido de 9.000 empleados (un 17% de su plantilla global) y una ampliación de capital de 4.300 millones de dólares.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Economía