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Rebelión de alcaldes contra la llegada del AVE a El Prat

El presidente del Gobierno asume que se han producido 'fallos' en las obras del AVE a Barcelona en su visita sorpresa.

GLÒRIA AYUSO

Nuevo escollo para el Gobierno. Los alcaldes de Barcelona y el área metropolitana no ven con buenos ojos la llegada del AVE a El Prat antes que a la capital catalana. Así se lo hicieron saber al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que de buena mañana cogió un avión y se presentó por sorpresa al barrio de Bellvitge de L'Hospitalet para observar con sus propios ojos la zona donde han aparecido los socavones.

Estos agujeros junto a las vías provocados por las obras del AVE han obligado a cortar desde hace ocho días las líneas C-2, C-10 y C-7 de Cercanías para garantizar la seguridad.

El presidente quiso mostrar así que es él en persona quien se encarga de gestionar la crisis. Pero las cosas no le resultaron nada fáciles: durante su visita apareció un nuevo socavón cerca de las vías, que rápidamente se tapó empleando hasta cinco hormigoneras. Era el décimo reconocido por Adif, aunque la dirección de la obra admitió que ha habido muchos más.
Zapatero explicó que a partir de ahora primará ante todo la seguridad en las obras y el restablecimiento del servicio de Cercanías con todas las garantías. Sin embargo, no quiso aventurarse y evitó dar una fecha sobre cuándo volverán a funcionar. Los trabajos, dijo, se realizarán 'con la tranquilidad suficiente para hacer las cosas bien'.

Zapatero compareció ante los medios de comunicación acompañado por el presidente de la Generalitat, José Montilla, y el alcalde de L'Hospitalet, Celestino Corbacho. Aseguró que pondrá todos los medios a su alcance para mejorar Cercanías y lograr la llegada del AVE a Barcelona.

Respaldo del presidente

En respuesta a la demanda de dimisión de la ministra Magdalena Álvarez dijo que 'no está prevista ninguna decisión al respecto ni la va a haber'. Aún así asumió los errores en las obras, algo que consideró necesario para obtener la confianza de los ciudadanos. Como presidente del Ejecutivo, dijo tener 'responsabilidad directa', motivo por el cual 'debe dar respuesta en coordinación con la Generalitat y los alcaldes'.

Esta afirmación la realizó tras escuchar las quejas de los alcaldes de las poblaciones por las que discurre el AVE, con los que se reunió durante más de una hora. Los ediles le mostraron su profundo malestar por la interrupción prolongada de Cercanías y por el hecho de que Fomento haya empezado a construir una estación provisional del AVE en El Prat sin consultarlo antes con ninguna administración catalana.

El secretario de Infraestructuras, Víctor Morlán, reconoció el sábado que Fomento construye desde hace días la estación provisional en El Prat, tal y como avanzó Público el viernes, debido a la imposibilidad de que el AVE llegue a Sants el 21 de diciembre.

Una 'ocurrencia'

Tanto el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, como el de El Prat, Lluís Tejedor, rechazaron tajantemente esta alternativa. 'El proyecto plantea muchos problemas operativos y no es en absoluto deseable', dijo Hereu. Por su parte, Tejedor calificó de 'ocurrencia' la actuación de Fomento y criticó que se haya hecho sin informar al Consistorio.

'Si fuera una alternativa razonable, el ayuntamiento la acogería'. Sin embargo, en su opinión, 'El Prat no está preparada para esto' porque los accesos a la estación provisional no son los adecuados.

La apertura de la instalación obligaría a Cercanías a asumir el transporte de los viajeros de la alta velocidad de Barcelona a El Prat y viceversa, lo que según los alcaldes colapsaría aún más una red ya muy saturada. Tejedor se mostró confiado en que Zapatero ordenará que 'desmonten la estructura' que en los últimos días se ha levantado en el municipio. Frente a tanta oposición, el presidente 'ha tomado nota', aseguró el alcalde de Barcelona.

Zapatero inició la visita a Bellvitge recogiendo a pie de calle explicaciones sobre las obras del presidente de OHL, Juan Miguel Villar Mir. La presencia del jefe del Ejecutivo despertó mucha expectación en el humilde barrio de Bellvitge, donde numerosos vecinos le dieron muestras de apoyo.

Montilla y Zapatero agradecieron el 'civismo' del que han hecho gala los catalanes ante la crisis de Cercanías. Para hoy está prevista la primera manifestación ciudadana en Barcelona contra la paralización del servicio de trenes.

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