El restablecimiento de Cercanías va para largo

Sigue la incógnita y el malestar. El Ministerio de Fomento no aclaró tampoco ayer cuándo se restablecerá el servicio de Cercanías de Barcelona. Esta es una de las principales preocupaciones de más de 150.000 personas, que son las que cada día utilizan las líneas C-2 sur, C-7, C-10 y los trenes de media y larga distancia, cuyo servicio está alterado desde hace 12 días.

Fomento convocó ayer a la Generalitat y a los alcaldes de los municipios afectados. Todos esperaban una fecha. Pero la respuesta fue otra. El lunes las empresas que están actuando de urgencia para poder restablecer Cercanías en L'Hospitalet, donde han aparecido los socavones, presentarán un cronograma de todos los trabajos que deben efectuar.

A partir de esta documentación, Fomento cuantificará el tiempo que tardará en volver a funcionar la red ferroviaria. El delegado del ministerio en asuntos ferroviarios, Jordi Prat, subrayó que eso no ocurrirá hasta que "no se garantice la seguridad en las vías convencionales y la zona próxima de edificaciones". Todo hace pensar que no será pronto.

La falta de concreción molestó a la Generalitat, que había afirmado unos días atrás que el mismo lunes el servicio podría restablecerse. El Gobierno catalán, frente a tanto retraso, considera que quien tiene que dar la cara es Fomento, la administración que ha generado la crisis y debe solucionarla.

Durante la semana del 22 al 28 de octubre unas 525.000 personas utilizaron los autocares alternativos que habilitó Renfe. A éstas deben sumarse otras 400.000 que optaron por utilizar las líneas regulares de autobuses.

"El dispositivo está funcionando bien, pero en caso de que se alargue el problema reforzaremos las líneas convencionales", explicó el presidente de la Entidad Metropolitana del Transporte y alcalde de Sant Joan Despí, Antoni Poveda.

Compatibilización con Fira

El Ayuntamiento de Barcelona deberá hacer compatible la celebración del salón inmobiliario Meeting Point, que se celebra a partir del 6 de noviembre en Montjuic, con la gran estación de autobuses que ha instalado Renfe en la zona de Maria Cristina. Para ello reforzará la señalización y habilitará un dispositivo específico de la Guardia Urbana.