Público
Público

Brexit Se disparan en Londres las solicitudes de nacionalidad española

El número de estudiantes de español y de solicitantes de la nacionalidad española crece en Londres. El brexit y la gran comunidad de descendientes de sefardíes expulsados de España en el siglo XV que vive en la ciudad son los principales motores.

Fachada de la sede del Instituto Cervantes en Londres.

Hacía sólo un año de la celebración del referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea cuando en 2017 el British Council, el organismo gubernamental para la difusión de la lengua y cultura británicas, publicaba el ranking de 'Las lenguas que Reino Unido más necesitará después del brexit'. El informe tenía en consideración factores económicos, geopolíticos, culturales y educativos y ahí estaba el español en primer lugar.

Dos años después los datos confirman que los británicos captaron el mensaje. En la enseñanza obligatoria ha aumentado "rápidamente" el número de estudiantes que eligen español como laguna extranjera hasta el punto de que la previsión es que en 2020 alcance o incluso supere al francés, el actual número uno.

Con el inglés convertido en la lengua del mundo, el interés de los británicos por estudiar otro idioma siempre ha sido muy bajo y mucho menor por conseguir un título que lo acreditara. Pero que las cosas están cambiando lo han notado en la sede del Instituto Cervantes en Londres donde, además de fomentar la cultura española y latinoamericana, también imparten cursos de lengua española y se realizan los exámenes oficiales. Su director, Ignacio Peyró, cuenta que se ha producido "una subida importante estos últimos años y en 2018 por primera vez en mucho tiempo pasamos de 4.000 matriculados".

Pablo Martínez Gila conoce muy bien el perfil de los alumnos del Instituto Cervantes de Londres porque él es el jefe de estudios: "Son muy anti-brexit, muy europeístas y en el momento en que se empezó a hablar del brexit mucha gente empezó a apuntarse a los cursos de idiomas".

Peyró lo confirma: "Por supuesto, el brexit es un factor que, en una parte de la población, puede avivar el interés por fortalecer vínculos con el continente y ahí la lengua tiene un papel importante que jugar, por no hablar de los beneficios de la ciudadanía europea".

Porque uno de los requisitos para conseguir la nacionalidad española es acreditar un conocimiento de la lengua española con nivel A2, el que tiene los exámenes más demandados; otro es pasar un segundo examen de conocimientos constitucionales y socioculturales.

El año pasado 673 británicos se presentaron al examen de A2 y 312 al examen de conocimiento para obtener la nacionalidad; un test con entre 20 y 25 preguntas que se completa en una hora y que se realiza siempre el último jueves de cada mes en todas las sedes que el Instituto tiene en el mundo.

El año pasado 673 británicos se presentaron al examen del nivel A2

Comprobamos que en la de Londres el espacio habilitado hasta ahora para esta prueba se ha quedado pequeño: "Antes teníamos un cupo de 10 y lo hemos tenido que ampliar a 20 pero para julio ya nos han pedido que lo ampliemos hasta 30", confirma Martínez Gila.

Pero como él mismo explica, "el instituto es un reflejo de lo que es la ciudad de Londres y entre un 40% y un 50% de nuestros alumnos no son ingleses".

Los descendientes de sefardíes, los mayores solicitantes

Porque a los británicos interesados en conseguir el pasaporte español se les han sumado los descendientes de los sefardíes expulsados de España en el siglo XV por los Reyes Católicos.

La ley 12/2015 aprobada por el gobierno español en 2015 les permite recuperar la nacionalidad española aunque no cumplan con otros requisitos como residir o haber residido en nuestro país. Sólo tienen que acreditar el conocimiento de la lengua, pasar el examen de conocimientos y demostrar sus orígenes sefardíes.

En Londres hay una gran comunidad de ellos, sobre todo procedentes de países latinoamericanos, dispuesta a pasar el examen antes del 1 de octubre, la fecha en la que concluye el plazo.

Rachel Leon es una de ellos. A sus 52 años tiene pasaporte venezolano, estadounidense, británico y ahora quiere conseguir el español: "Mi familia es turca y se fueron a Venezuela hace 50 años. Yo nací allí, luego viví más de 20 años en Miami y ahora llevo 7 en Londres. Pero me quiero retirar en Canarias". Como ella misma apunta: "Por algo nos llamaban los judíos errantes".

Cuenta orgullosa que su familia son "sefarditas judíos que lucharon mucho" y que siempre ha mantenido sus creencias religiosas y ha hablado a sus hijos en español. "Mi hija vive en Berlín y mi hijo en la República Checa y ambos han conseguido ya la nacionalidad española por ser sefardíes", cuenta antes de hacer el examen.

Y sí, el brexit es una de las razones por las que Rachel no quiere seguir en Londres: "No nos querían mucho a los inmigrantes aquí pero ahora menos. Yo trabajo en un hospital y oigo los comentarios de los pacientes, que me han llegado a decir que por qué no voto brexit si soy americana".

Junto a ella está Rodrigo Garza, mexicano residente en Londres de abuela sefardí y él también quiere la nacionalidad española "para tener movilidad dentro de Europa (después del brexit)".

Antonia Holguín comenzó las gestiones hace un mes y ya está haciendo el examen. Al igual que Rachel y Rodrigo, esta estudiante de 22 años no ha necesitado examinarse del A2 porque es colombiana y está acreditado su conocimiento de la lengua. Pero en su caso el interés por la nacionalidad española es sólo como trampolín: "La que me interesa es la residencia británica y espero que sea más fácil conseguirla antes del brexit teniendo la española".

A Mónica Linares sí le interesa "ser parte de la unión europea" tanto para ella como para sus hijos. Por eso no ha dudado en sacar un hueco durante sus dos semanas de vacaciones en Londres para hacer el examen de nacionalidad: "En Colombia se había cerrado el cupo porque hay mucha gente que lo está haciendo".

En su caso, los trámites para demostrar sus orígenes sefardíes han sido dignos de una novela detectivesca: "Tuve que buscar las partidas de nacimiento de mi bisabuela y de su padre y presentar un árbol genealógico". El mismo requisito que han tenido que cumplir todos los demás que salen del examen antes de que se cumpla el tiempo límite y contentos porque de aquí a unas semanas podrían ser españoles.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional