Público
Público

Santorum, el enviado de Dios en las primarias

La amenaza más seria de Mitt Romney tie

ISABEL PIQUER

Cuando Rick Santorum quedó en segundo lugar (y luego ganó por una treintena de votos) las primarias de Iowa en enero, nadie dio un duro por su candidatura. Santorum, decían los analistas, sería flor de un día. Le pasaría lo que al ex gobernador de Arkansas, Mike Huckabee, hace cuatro años: entretendría durante un tiempo al voto religioso y desaparecía rápidamente. Dos meses más tarde se ha convertido en la amenaza más seria de Mitt Romney, el supuesto favorito que sigue sin convencer a los republicanos conservadores.

A principio de la contienda Santorum ni siquiera parecía estar en sintonía con el tono del debate electoral centrado en la crisis y el paro. El ex senador de Pensilvania y favorito del Tea Party, basaba su campaña en temas sociales (lo que en EEUU llaman 'guerras culturales'): el aborto, los derechos gays, el papel de las iglesias, y una visión ultra religiosa de la historia y del papel del Gobierno.

Santorum defiende en sus mítines los derechos 'otorgados por Dios' de los estadounidenses en los que no debe interferir el gobierno federal, propone reforzar la familia como unidad económica y 'fortalecer las ayudas de las organizaciones caritativas y religiosas' para amparar al individuo de la intrusión de Washington. Santorum es católico pero su discurso sienta bien entre los evangelistas.

Santorum defiende en sus mítines los derechos 'otorgados por Dios'

El candidato despertó la polémica hace una semana al acusar a Barack Obama de obedecer a una 'teología falsa...que no se basa en la Biblia', en lo que muchos entendieron como una referencia velada al supuesto islamismo secreto del presidente estadounidense. Santorum tuvo que explicarse. Se refería al fundamentalismo ecológico de Obama: 'No estamos aquí para servir la Tierra. Ese no es el objetivo. El objetivo es el hombre'.

Estos días también ha avivado el debate al criticar los test prenatales porque, según el, animan a las madres a abortar, sobre todo si el feto tiene defectos. En declaraciones al blog evangélico Caffeinated Thoughts Santorum también se ha declarado en contra de los métodos contraceptivos porque 'permiten hacer cosas en el ámbito sexual que están en contra de lo que debería ser'.

Son temas que mueven mucho a los ultra conservadores y podrían haber motivado su fervor electoral en las primarias de Minnesota, Misuri y Colorado que Santorum ganó el pasado día 7, resucitando milagrosamente su candidatura.

Pero muchos temen su extremismo. En el reciente debate electoral celebrado en Arizona, Santorum matizó que no intentaría imponer sus opiniones con medidas gubernamentales. La página web de sensacionalismo político, The Drudge Report, rescató hace poco un discurso del candidato en la Universidad Ave María de Florida en 2008 en las que aseguraba que el diablo tenía un interés muy especial en Estados Unidos: 'Satán tiene la vista puesta en las instituciones estadounidenses y usa los vicios de la vanidad, el orgullo y la sensualidad para atacar la raíces de la tradición'.

'Satán tiene la vista puesta en las instituciones estadounidenses', amenaza

Santorum ha sabido usar los tropiezos de sus adversarios: ante un Romney criticado por su fortuna ha recordado los orígenes humildes de su familia. En respuesta a los excesos grandilocuentes de Newt Gingrich se ha presentado como un tipo sencillo, aunque ha pasado 16 años en Washington y sus declaraciones de Hacienda revelan que ganó casi un millón de dólares en 2010, procedentes en gran parte de Excelsior, su consultoría en la capital.

Santorum, hijo de una familia de inmigrantes italianos, empezó su carrera política principios de los 80 trabajando para John Heinz, senador republicano por Pensilvania, heredero del imperio del kétchup y primer marido de Teresa Heinz (que luego se casaría con John Kerry que perdió en las presidenciales ante George Bush en 2004). En 1990, con 32 años, fue elegido a la Cámara de Representantes por el distrito 18 de Pensilvania (alrededores de Pittsburgh). En 1995 se hizo senador, puesto que ocuparía durante dos mandatos, hasta 2007.

Durante su etapa en Washington, Santorum se forjó una reputación de conservador entre los conservadores. Intentó incluir el creacionismo en la legislación educativa promovida por George Bush en 2001, 'una teoría científica que debería enseñares en las clases de ciencias'. Promovió el 'Iran Freedom and Support Act' en 2005 que otorgó diez millones de dólares a toda oposición que promoviera el cambio de régimen en Teherán, postura que reiteró recientemente al afirmar en uno de los debates republicanos que no dudaría en atacar Irán en caso de amenaza nuclear.

Intentó incluir el creacionismo en el sistema educativo como 'teoría científica'

Santorum también se ha mostrado a favor de las técnicas 'mejoradas' de interrogación (léase asfixia simulada) y en mayo del año pasado dijo incluso que el senador John McCain, prisionero en Vietnam durante más de cinco años y que opone al 'waterboarding', no entendía los términos del debate.

En Detroit hace dos semanas, el candidato volvía a hablar de su abuelo, Pietro Santorum que emigró de la Italia de Mussolini para trabajar hasta los 72 años en las minas del sur de Pensilvania y que fue tesorero de su sindicato. En un momento de sinceridad, el aspirante a la nominación republicana reconoció que si Pietro 'viera ahora que su nieto es un candidato conservador, se revolvería en su tumba'.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional