Ayuso se erige como ariete ideológico del PP con mensaje a Feijóo incluido: "No se puede arreglar solo la economía"

Cargó contra el feminismo, contra el ecologismo, contra el socialismo y, de alguna forma, Díaz Ayuso también enmendó la estrategia de Núñez Feijóo al frente del PP. "El centroderecha no puede dejar que la izquierda colonice problemas y arreglar solo la economía", dijo la recién proclamada presidenta del PP de Madrid ante un Feijóo que desde que aterrizó en Génova solo quiere hablar de economía. 

Ayuso defiende que este sábado ha hablado de lo que "siempre habla", pero lo cierto es que ha pronunciado uno de sus discursos más ideológicos. En claro contraste con el de su telonero, Núñez Feijóo. Aunque en ocasiones costase entender el sentido de sus frases, Díaz Ayuso desplegó un menú de ataques a la reivindicaciones feministas.

"Es la división artificial en 10 sexos y la confusión a los más jóvenes lo que les anima a dividir y enfrentar al hombre con la mujer, eternos compañeros de viaje, con el fin de despojar a las personas de la seguridad en sí mismas, y dirigirlas desde una aplicación móvil con politono de república bananera", llegó a decir la presidenta madrileña.

Díaz Ayuso leyó un discurso, que ella misma escribió, en el que cargaba de manera personal contra la ministra de Igualdad Irene Montero: "Una señora que nos da lecciones de feminismo mientras su mayor éxito político es ser la pareja de". Los populares rompieron en aplausos. 

Si Feijóo busca erigirse como la alternativa al Gobierno, Ayuso es más ambiciosa y quiere ser la alternativa al socialismo. La política madrileña reconoció que no quiere "combatir personas, sino ideas y actitudes perversas". "A saber: el socialismo no funciona", escribió primero y pronunció después, frente a un auditorio que acogía a más de 2000 afiliados del PP. Entre ellos Cuca Gamarra, secretaria general del partido, González Pons o Elías Bendodo. Faltaron a la cita, a pesar de que se les invitó, Mariano Rajoy y José María Aznar.

Ayuso se hace con la libertad

El coordinador general del PP, Elías Bendodo, escuchó a Ayuso referirse a "una administración autonómica que se ha inventado una nación", en referencia a Catalunya, después de la polémica que generaron unas declaraciones en las que reconocía que España era un Estado plurinacional. También Feijóo habló hace dos semanas de la "nacionalidad catalana". Díaz Ayuso no se dejó nada en el tintero y avisó a Feijóo de que "Madrid es contrapeso". "Madrid no es un terruño al que nada le ha de importar lo que ocurra en otros rincones del país", dijo la recién convertida en baronesa del PP.

Minutos antes Feijóo le había otorgado a Ayuso la emancipación absoluta de Génova: "Desde hoy Isabel y su equipo son más libres para conseguir que el PP de Madrid sea más libre". El gallego usó tantas veces como pudo el late motiv de Ayuso. "Que Madrid sea libre para servir libremente a los madrileños".

Y en ese uso de la libertad, Ayuso dará la batalla cultural que tanto ansiaba Cayetana Álvarez de Toledo mientras Feijóo, al menos de momento, no se sale del registro económico y de gestión. Este equilibrio entierra la crisis interna del PP.