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Sánchez arranca la cumbre con Marruecos con plantón de Mohamed VI y halagos del primer ministro por su giro en el Sáhara

Aziz Ajanuch recuerda al presidente que "las relaciones bilaterales han entrado en una nueva fase" tras esa decisión sobre el conflicto saharaui. El líder del Ejecutivo participa en un foro empresarial junto a su homólogo marroquí en la previa de la Reunión de Alto Nivel (RAN) que se celebra en Rabat. Sánchez y el rey marroquí no se verán finalmente. 

El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez (i), y el primer ministro marroquí, Aziz Akhannouc (d), en el acto de clausura del Foro Empresarial España-Marruecos, que se celebra en el marco de la XII Reunión de Alto Nivel Marruecos-España, en el Rabat Marriot
El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez (i), y el primer ministro marroquí, Aziz Akhannouc (d), en el acto de clausura del Foro Empresarial España-Marruecos, que se celebra en el marco de la XII Reunión de Alto Nivel Marruecos-España, en el Rabat Marriott Hotel, en Rabat (Marruecos). David Zorrakino / Europa Press

Pedro Sánchez ya está en Rabat. El presidente del Gobierno ha iniciado este miércoles su agenda en Marruecos en el marco de la Reunión de Alto Nivel (RAN) con la que pretende cerrar definitivamente la crisis entre ambos países. El cambio de postura sobre el Sáhara Occidental comenzó esta "nueva etapa". Así además lo ha recordado y agradecido públicamente el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch, en un foro empresarial previo a la RAN.  

La cumbre viene marcada también por el plantón dado por el rey Mohamed VI al líder del Ejecutivo. Moncloa rebaja la importancia de este asunto y considera que la llamada telefónica ha sido un gesto suficientemente importante, que demuestra la implicación del monarca con la RAN y que ha durado media hora, el mismo tiempo que suele usarse para recepciones de este tipo si fueran en persona. Eso sí, hasta este mismo martes habían dejado la puerta abierta a un encuentro. El monarca no está en su país sino en Gabón de vacaciones y ha emplazado a Sánchez a una próxima cita en Rabat. 

Este miércoles también ha habido otra ausencia destacada. La del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, justo un día después de que el Gobierno anunciara la subida del Salario Mínimo Interprofesional y sin acuerdo con la patronal. 

"Las relaciones bilaterales han entrado en una nueva fase gracias al apoyo de su Gobierno al plan de autonomía. España tuvo el valor de adoptar una visión histórica y realista, lo que valoramos aquí". Estas han sido las palabras, recibidas con aplausos por los asistentes, de Ajanuch a Sánchez.

El mandatario marroquí ha destacado en su intervención que las relaciones entre ambos países "sufrieron sus altibajos por problemas y malentendidos" pero que siempre se han encontrado las "soluciones adecuadas". "Siempre somos más fuertes si estamos juntos", ha manifestado Ajanuch. 

Las palabras del primer ministro sobre el Sáhara se producen en un contexto también en el que el Gobierno tiene prevista la apertura de una sede del Instituto Cervantes en la ciudad de El Aaiún. Un asunto muy polémico, postergado durante años pese a algunas voluntades políticas, y fuertemente criticado por el Frente Polisario. Considera la organización saharaui que de llevarse a cabo supone blanquear y reconocer la ocupación del territorio saharaui por parte de Marruecos. 

En la previa de la RAN, fuentes gubernamentales dieron a entender que no se trataría el asunto del Sáhara de forma oficial durante la cumbre. "La posición de España es la que se incluyó en la declaración conjunta del 7 de abril y está clara", se reafirmaron. Está por ver, en todo caso, si habrá alguna mención en la declaración conjunta que se espera tras la firma de más de una veintena de acuerdos en diferentes ámbitos. 

Antes de Ajanuch, Sánchez ha hecho un discurso principalmente económico. En su caso ha evitado cualquier tipo de mención al Sáhara. Sí que ha hecho declaraciones generales sobre la relación con Marruecos. "Consolidaremos los acuerdos adoptados con Mohamed VI. Nuestro objetivo es abrir una nueva etapa", ha afirmado Sánchez.

Aduanas en Ceuta y Melilla y apuesta por energía verde

Entre esos acuerdos concretos hay especial expectación por el establecimiento de aduanas en Ceuta y Melilla. Para el Gobierno supondría un reconocimiento implícito de la soberanía española de las dos ciudades autónomas. Algo que en numerosos sectores marroquíes niegan. A las aduanas se ha referido explícitamente Sánchez en su intervención ante los empresarios. "Tenemos que abrir las puertas en lugar de cerrarlas. Por eso, el acuerdo para normalizar el paso de mercancía a través de los pasos aduaneros cobra importancia", ha afirmado. 

Más allá del volumen de importaciones, exportaciones y número de empresas españolas en Marruecos, Sánchez ha incidido especialmente en la apuesta conjunta por las energías renovables. "Casi todos los operadores de energía españoles tienen presencia en Marruecos. Es un sector donde se está produciendo una revolución. Compartimos la apuesta por acelerar la descarbonización", ha destacado. 

Para Sánchez, tanto Marruecos como España tienen todas las condiciones necesarias para ser referentes en un cambio de paradigma energético basado en "oportunidades" como el hidrógenos verde. El presidente ha mostrado un "legítimo orgullo" ante la "decidida apuesta" de las empresas españolas por Marruecos.

La RAN comienza oficialmente este jueves. A primera hora Sánchez y varios ministros, hasta 12 se han desplazado a Rabat, visitarán el Mausoleo de Mohamed V y realizarán una ofrenda floral. Acto seguido, Ajanuch y Sánchez volverán a encontrarse, esta vez de manera oficial y bilateral. De forma paralela, los ministros participantes mantendrán sus respectivas reuniones bilaterales. Por último, comenzará la sesión plenaria y se procederá a la firma de acuerdos antes de una declaración institucional conjunta entre ambos jefes de Gobierno que será sin preguntas de la prensa.  

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