Entrevista a Montse Sánchez"Apostamos por la reducción de la jornada laboral a 30 horas, ir a las 37,5 es totalmente insuficiente"
Hablamos con la secretaria general de la CGT de Catalunya, que vive un fuerte crecimiento y se ha consolidado como el tercer sindicato del territorio.

Barcelona-
La Confederació General del Treball (CGT) de Catalunya es desde hace tiempo el tercer sindicato con más afiliados del territorio, en parte gracias a un crecimiento progresivo de su militancia. Si hace una década no llegaba a los 15.000, cerró 2024 ya por encima de los 23.300. Pero, sobre todo, es la organización que más huelgas convoca, muy por delante de CCOO y UGT, los sindicatos mayoritarios que la superan -y de mucho- en afiliación.
Nos encontramos con Montse Sánchez, secretaria general del sindicato libertario desde hace poco más de dos años, para abordar las razones de este auge, sus principales focos de acción -como la reducción de la jornada laboral o la mejora de los salarios- o el papel del sindicalismo para frenar a la extrema derecha.
La CGT se ha consolidado como el tercer sindicato con más afiliados de Catalunya y acumula años de crecimiento. A la vez, hace casi una década que lidera la convocatoria de huelgas. ¿Esta apuesta por el conflicto es lo que explica el auge?
Sin lugar a duda. Se ha demostrado que la CGT es una herramienta de lucha para las trabajadoras. Apostamos por mantener el conflicto vivo y pensamos que la herramienta de la huelga se tiene que poner en marcha en todos aquellos conflictos que son claves para poder conseguir derechos laborales y mejorar los que existen.
Hay una progresiva feminización de los afiliados y también logran cierto espacio entre los jóvenes. ¿Estos colectivos sienten que son un instrumento útil para luchar contra la precariedad que les golpea especialmente?
"Se ha demostrado que la CGT es una herramienta de lucha para las trabajadoras"
Sí. Sobre todo en las primeras huelgas del 8 de marzo el sindicato tuvo un mayor acercamiento a sectores feminizados, a pesar de que siempre había estado integrado en ellos, con más presencia e impulsando más conflictos. No tenemos ninguna duda de que esto ha impulsado que más gente se sienta identificada con nuestro modelo sindical y ha hecho que el crecimiento se acabe materializando en mujeres, personas disidentes y gente joven.
En un contexto global de auge de los discursos de odio, crecimiento de la extrema derecha, consolidación de las desigualdades y empobrecimiento de sectores cada vez más grandes de la población, ¿qué papel tienen que jugar los sindicatos hoy en día?
Tenemos claro el papel que tiene que jugar la CGT, que es antifascista. Lo que pretendemos es que en todos los centros de trabajo la gente se sienta identificada a organizarse en un sindicato como el nuestro, precisamente para frenar este auge de la extrema derecha. Somos conscientes de que hay que parar sus políticas y apostar por un modelo de sindicato de base, desde los centros de trabajo y autogestionado por las propias trabajadoras, y evidentemente defender aquello público con un sindicalismo que integre a todas las diversidades.
¿Cómo se combate a la extrema derecha desde un sindicato; hay que ofrecer un horizonte de lucha, pero también de esperanza?
Evidentemente de lucha. Hay discursos con los cuales no te puedes limitar a escucharlos y quedarte ajeno a ellos. Apostamos por la pedagogía a la clase trabajadora, plantearle qué futuro quiere, uno que discrimina y coarta libertades o uno en que realmente como sujeto político te puedas ir desarrollando sin este tipo de limitaciones. Por lo tanto, para nosotros es una combinación de lucha, esperanza y, entre medias, pedagogía constante, sobre todo entre la gente más joven. Al fin y al cabo, el futuro no está escrito y con la lucha se puede cambiar.
"El futuro no está escrito y con la lucha se puede cambiar"
¿El sindicalismo tiene que incorporar elementos más allá de las relaciones laborales, como por ejemplo implicarse en una transición ecosocial o en la lucha por el derecho a la vivienda? En definitiva, defender un modelo distinto de sociedad.
El modelo capitalista lo que ha hecho es intentar que los sindicatos se ciñan exclusivamente a los centros de trabajo, donde parece que solo podemos luchar por las condiciones laborales, pero evidentemente nosotros vamos más allá. Como ejemplo está lo que pasó con la DANA en València, donde rápidamente apostamos por hacer una red autogestionada de ayuda para todas las personas afectadas. Estamos potenciando las relaciones con los movimientos sociales y por luchas como la de la vivienda, estamos totalmente vinculadas al Sindicat de Llogateres y potenciamos estas luchas porque consideramos que son imprescindibles. Por lo tanto, sí, apostamos por ir más allá de los centros de trabajo. Tenemos claro que en estos espacios la gente se tiene que organizar y tiene que apostar por un modelo como el nuestro, pero no queremos que esto se quede aquí, sino que las personas militantes esto lo potencien en su barrio para impulsar temas como el ecologismo, el derecho a la vivienda, las pensiones públicas, la educación pública...
La CGT forma parte de la Taula Sindical de Catalunya, junto con la CNT, la COS o la IAC, entre otras organizaciones. ¿Qué papel tiene este organismo? ¿Es factible que haya una coordinación más estrecha entre sus integrantes?
Lo que hace es coordinar la implicación en diferentes luchas de varios sindicatos alternativos. Esta Mesa Sindical va teniendo altibajos como cualquier otra coordinación que se pueda dar entre varias organizaciones, pero la idea es que se vaya potenciando, pese a que no depende únicamente de la CGT.
En volumen de afiliación, siguen muy por debajo de CCOO y UGT de Catalunya. ¿Qué relaciones tienen con ellos?
Hay algunas luchas en las que tenemos una unidad, pero son muy pocas y evidentemente el sindicalismo que nosotros llevamos a cabo es muy diferente del que hacen los sindicatos que consideramos de la derrota, que nos quieren vender como bueno lo que es de mínimos o, incluso, malo. Nos es muy difícil confluir con estas dos organizaciones. En las negociaciones colectivas, apostamos por intensificar el conflicto y para nosotras todas son una oportunidad de ir más allá, de conseguir salarios más altos, una reducción de la jornada real, de eliminar las horas extraordinarias... En cambio, ellos en algunos casos incluso legitiman horas extraordinarias obligatorias.
"Nos es muy difícil confluir con CCOO y UGT"
¿Cómo explican la diferencia tan grande en el volumen de afiliación?
No podría explicarlo, yo también me lo pregunto. Pero tenemos muy claro que en la CGT vamos por un buen camino, porque cada vez son más personas las que apuestan por un sindicalismo como el nuestro. No tengo la explicación de por qué la gente sigue apostando por estos sindicatos. En las negociaciones colectivas tienen un estatus jerárquico muy marcado a la hora de llevarlas a cabo, mientras nosotros apostamos por un modelo en el que son las propias trabajadoras, que están atravesadas por la precariedad de su propio sector, las que están decidiendo qué mejoras quieren y apostando por acciones directas como huelgas, manifestaciones o concentraciones para conseguirlas. Mientras, ellos tienen una forma mucho más diplomática y nos venden el tema de la paz social, es totalmente diferente.
¿Hacer un salto de escala en afiliación e incidencia social es un objetivo para la CGT?
Hacer un salto para poder consolidarnos como sindicato mayoritario no nos lo hemos planteado, el objetivo que tenemos es tener un crecimiento de calidad, precisamente porque estamos totalmente en contra de un sindicalismo servicial que acabe haciendo gestiones de personal o burocracia. Es decir, nuestro crecimiento tiene que estar vinculado a la militancia, la gente tiene que entender que la CGT no es un ente abstracto que está allá, sino que la construyen las mismas personas que están dentro, que deben tener un compromiso, mayor o menor. La afiliación a la CGT se traduce en militancia. Esto significa que los propios afiliados deben tener un papel proactivo en el sindicato y, por lo tanto, no podemos crecer a cualquier precio.
"La afiliación a la CGT se traduce en militancia, las personas que están dentro deben tener un compromiso"
¿La recuperación del poder adquisitivo y la batalla por la reducción de la jornada laboral son los grandes focos de acción a corto plazo del sindicato?
Tenemos más objetivos, pero uno de los pilares fundamentales es la reducción de la jornada real. Apostamos por las 30 horas, lo que se intenta implementar de ir hacia las 37,5 horas es totalmente insuficiente. Ya hay ciertos sectores que las tienen aplicadas y ni siquiera se llevan a cabo, precisamente por lo que te decía de que hay sindicatos que aceptan jornadas adicionales obligatorias. Entendemos que las 37,5 horas no cumplen el ideario que defendemos, de disfrutar de nuestro tiempo libre y tener más relación con nuestro entorno. Aumentar los salarios y recuperar poder adquisitivo también es un pilar fundamental, y un tercero es el de los cuidados, tanto profesionales como no profesionales, donde es muy difícil que las compañeras se integren también en la lucha sindical.
La jornada de 40 horas fue una conquista de hace un siglo. ¿Cómo se explica que durante tanto tiempo nos hayamos estancado en esto, hasta la reactivación actual de la demanda para reducirla?
Pues creo que ha estado estancado porque no ha habido ningún movimiento ni organización sindical que apostara por la reducción de la jornada. Los últimos años hemos visto como cada vez más aumenta el índice de enfermedades profesionales, la salud mental está súper tocada y muchas de estas enfermedades vienen del estrés y la depresión que provoca precisamente la sobrecarga de trabajo. Como CGT hace mucho tiempo que apostamos por la reducción de la jornada y, en cierto modo, el crecimiento que hemos tenido hace que ahora podamos trabajarla más en profundidad. Y esto también se ha trasladado a que haya una reacción por parte de las instituciones al empezar a abordar la reducción, aunque de momento sea muy tímida.
Han participado en documentos e informes que defienden una transición ecosocial, basada en un decrecimiento planificado, en contraste con la transición verde, que promueve la UE y que, por resumir, no cuestiona un modelo económico basado en el crecimiento. ¿La clave en la transición que defienden es hacerla sin perder puestos de trabajo?
Obviamente. El discurso que se implementa es precisamente que cuando hay esta transición de alguna forma hay que tener claro que habrá pérdidas de puestos de trabajo y nosotros apostamos por hacer una transición donde el foco sea cómo construir otros puestos de trabajo, que evidentemente sean más amables con el entorno y cumplan con la ecología y no con el greenwashing que nos quieren vender. Se tiene que hacer la transición teniendo en cuenta el cambio climático y cómo reducimos de verdad los residuos, dejamos de utilizar materiales tóxicos, dejamos de explotar las fuentes naturales, etc.
Es trabajadora de Seat y, justamente, los últimos meses numerosas informaciones advierten del pinchazo de los vehículos eléctricos europeos, que se suman al pronóstico de que la apuesta por estos vehículos comportará un recorte de trabajadores del sector. ¿Cómo lo ve en su día a día en Martorell?
La realidad es que en Martorell estamos currando a unos ritmos de trabajo bestiales y este marzo se han firmado en el calendario todas las jornadas laborales adicionales habidas y por haber, es decir, trabajar sábados y domingos. Además, venimos de un récord histórico en los beneficios. Por lo tanto, hay una contradicción brutal entre las declaraciones que se están haciendo por parte del comité ejecutivo con la realidad del trabajo que se está haciendo en Seat Martorell.
Estamos en un momento de escalada belicista, con muchos gobiernos dispuestos a incrementar su gasto militar, cosa que obviamente repercutirá en la inversión social. ¿Qué piensan?
Estamos totalmente en contra. Apostamos precisamente por que haya inversiones públicas que generen bienestar para la población y esto supone invertir en educación y sanidad públicas, entre otros, y estamos totalmente en contra de las inversiones en armamento.


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