El gráfico que demuestra que algo está fallando: los superricos en EEUU pagan menos impuestos que sus secretarias

Publicado el 08 de octubre del 2019

Un simple gráfico para mostrar la peor cara del capitalismo. El triunfo del neoliberalismo en un solo clic. El que basta con hacer para observar la evolución de un gráfico que ha elaborado The New York Times para ilustrar un artículo de opinión de David Leonhardt. Una evolución histórica sobre el pago de impuestos según las diferentes rentas y que pone los pelos de punta.

Una curva, que en lugar de ser progresiva y ascendente como sucedía en la primera mitad y ecuador del siglo XX, sufre una acusada bajada en los últimos tiempos cuando se refiere a los impuestos que pagan los que más tienen. Una injusticia fiscal sin precedentes que queda reflejada en un libro que está llamado a dar mucho que hablar y que se publicará la próxima semana. El trabajo está elaborado por Emmanuel Saez y Gabriel Zucman, profesores de la Universidad de Berkeley y estudiosos de la economía.

Ambos han construido una base de datos histórica que rastrea los pagos de impuestos de los hogares en diferentes puntos del espectro de ingresos desde 1913, cuando comenzó el impuesto federal sobre la renta hasta el 2018, año en el que entró en vigor la última reforma fiscal de la Administración Trump con la que se introdujo una gran rebaja de impuestos a las grandes empresas.

Las cifras que expone el libro son escandalosas: por primera vez en los registros, los 400 estadounidenses más ricos el año pasado pagaron una tasa impositiva total más baja -en la que se incluyen los impuestos federales, estatales y locales- que cualquier otro grupo de ingresos.

La tasa impositiva general de las 400 personas más ricas de EEUU el año pasado fue solo del 23%, lo que significa que sus pagos de impuestos combinados equivalían a menos de una cuarta parte de sus ingresos totales. Cifra que contrasta con el 70% que pagaban en 1950 y o el 47% en 1980.

De esta forma, en los últimos 75 años el sistema tributario de los Estados Unidos se ha vuelto radicalmente menos progresivo perjudicando enormemente a las clases bajas y medias. Tanto es así, que ese top 400 pagan menos impuestos en estos momentos que las clases medias y bajas. Sin embargo, el 1% de ricos con rentas ligeramente inferiores a ese top 400 sí pagan tasas superiores.

El mantra que justifica estas medidas que benefician fiscalmente a los más ricos es que benefician al conjunto de la economía del país. Algo que se ha demostrado que es sencillamente mentira. Los ricos, a lo largo de la historia, se han ido haciendo más y más ricos y en las últimas décadas han ganado dinero a manos llenas. Sin embargo, las clases medias y bajas son las que han soportado sobre sus hombros la pérdida de poder adquisitivo a lo largo de los años.