Toda la plantilla del Atlético de Madrid, desde la de Primera División hasta los infantiles, está participando en un estudio que pretende investigar los riesgos que pueden tener los deportistas jóvenes de padecer una muerte súbita.

La iniciativa forma parte de la colaboración del club rojiblanco con el Servicio de Cardiología del Hospital Clínico de Madrid, que está llevando a cabo este estudio en el que se hace un análisis genético para ver si se detectan anomalías cardiacas asociadas a la muerte súbita.

"Es una herramienta básica para detectar y prevenir la muerte súbita de deportistas", explicó el lunes el doctor José María Villalón, jefe de los servicios médicos del Atlético de Madrid.

"Estas pruebas, mediante un análisis de sangre o una muestra de saliva, podrían detectarnos aproximadamente el 80% de las mutaciones genéticas que van a tener una cardiopatía genética asociada y que pueden dar como primer síntoma ese síncope o esa muerte súbita", agregó.

Villalón hizo estas declaraciones en la presentación del estudio del hospital madrileño, que cuenta con un secuenciador de última generación dotado por la Fundación BBVA que multiplica por 16 el número de secuenciaciones que se pueden hacer al año, acelerando, por tanto, la detección de cualquier anomalía.

El otro subgrupo que se va a analizar es el de los menores de 45 años que hayan ido a las urgencias del hospital con un síncope o presíncope por la práctica del deporte. En los 23 casos estudiados desde mayo de este año ya han detectado seis con anomalías.

El fútbol español ha sufrido la muerte de dos deportistas de Primera División en dos años, primero el sevillista Antonio Puerta, que se desvaneció en agosto de 2007 durante un partido liguero y falleció poco después, y hace dos meses, del capitán del Espanyol Dani Jarque, que murió repentinamente en el hotel de Italia en el que estaba concentrado su equipo.

Además, el centrocampista de la selección y del Real Madrid Rubén de la Red se desmayó durante un partido en octubre de 2008, pero los médicos todavía no han encontrado las causas. El futbolista de 24 años no ha vuelto a jugar.

Villalón afirmó que el estudio genético "es ya el presente y seguro que el gran futuro de la prueba diagnóstica", y agregó que lo han defendido tanto en el congreso anual de médicos del fútbol también ante el Comité Olímpico Español.

En España, donde hay más de seis millones de deportistas federados y más de 12 millones de personas practican deporte, no hay datos fiables sobre la incidencia de la muerte súbita cardíaca en la población general.

Las estimaciones son que entre 20 y 40 deportistas fallecen al año por muerte súbita, mientras que a nivel mundial se calcula que la incidencia es de entre uno y tres casos por 100.000 habitantes al año.

La muerte súbita se define como el fallecimiento inesperado por una enfermedad cardíaca conocida o desconocida. En deportistas menores de 45 años, la primera causa de muerte súbita es la arritmia ventricular, según los datos facilitados en la presentación del estudio.