Tiene 94 años y acaba de recibir un premio por su constancia. Se llama María Galbete (Pamplona, 1914) y es ex alumna del Programa Senior de la Universidad de Navarra, centro que ha querido reconocer sus ganas de aprender y la valentía de acudir con 88 años de nuevo a las aulas.

Es licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza, carrera que acabó poco antes de empezar la Guerra Civil, en unos años en los que la presencia de mujeres en las aulas era escasa, junto a su hermano, y casi setenta años después, en el año 2003 volvió de nuevo a clase hasta el pasado año.

Nunca ha trabajado de lo suyo y se confiesa una aventurera. Su marido, José Luis Los Arcos fue embajador y ha pasado la mayor parte de su vida viajando. El esquí, la natación y el monte han sido las grandes aficiones de "Maru", como le llaman los suyos, y ahora pasa las horas contemplando recuerdos, viejos papeles y ordenando sus cosas.

Sale todas las mañanas a la calle, no falta a misa de una en la Iglesia de la Inmaculada de Pamplona, enciende la tele aunque ni la mira, y en declaraciones a Efe recuerda como otra de sus pasiones era conducir, actividad que ya controlaba desde los 14 años.

En ocasiones acude a conferencias, sus favoritas son las de Historia, campo que más le gusta, especialmente la Historia de Navarra.

Se conserva estupenda y explica que lo suyo no es cuestión de secretos, "siempre he tenido buena salud y he hecho mucho ejercicio".

Dice que el premio que ha recibido es "inesperado y una gran sorpresa" que le ha llegado porque "a la edad que tengo he continuado interesada en los cursos de la universidad", actividades que considera "interesantes y sencillas y que despiertan el interés por la lectura".

María Galbete ha recibido esta mención especial del Programa Senior de la Universidad de Navarra, dirigido a personas mayores de 50 años, que cuenta con el mismo grupo de profesores que imparten las carreras de grado y los cursos de posgrado y doctorado en el centro y con algunos de otras instituciones.

No exigen a sus alumnos memorizar textos ni presentarse a exámenes, pero sí propician un intercambio de opiniones y una participación voluntaria en los debates que se desatan a la luz de los bloques temáticos desarrollados, explica el centro.

El objetivo de estos cursos es dar a las personas mayores la oportunidad de actualizar sus conocimientos a través de una formación que les permita una mayor participación en los roles sociales y laborales.