El empresario y financiero Javier de la Rosa ha salido hoy de la sala donde ha conocido su absolución del "caso Hacienda" con una enorme sonrisa, tras 20 años de pleito, y lo primero que ha hecho ha sido abrazar a su hija, que es abogada y ha participado en su defensa, y a su abogado Francesc Jufresa.

El empresario, considerado un modelo de emprendedor en la década de los noventa pero que ha pasado muchos años encarcelado por varios delitos económicos, ha sido uno de los pocos que han salido de la sala con el rostro feliz tras escuchar las condenas que han caído en sus compañeros de banquillo en esta causa.

El tribunal ha iniciado la lectura de su fallo con la declaración de absolución de Javier de la Rosa "de todos los delitos por los que venía siendo acusado".

La enésima batalla judicial a la que se ha enfrentado el empresario, fotografiado hace unos años comiéndose un bocadillo entre rejas en la cárcel Modelo por otras causas, la ha ganado.

"Se ha hecho un acto de justicia en el último acto judicial de una persona que lleva 20 años luchando en este caso y por fin la sentencia reconoce lo que dijimos entonces, que Javier de la Rosa no tenía ninguna relación con este tema", ha explicado, exultante, el abogado del empresario Francesc Jufresa.

En declaraciones a los periodistas, el letrado ha expresado "una enorme satisfacción" por la absolución de su cliente "después de 20 años de batalla judicial".

"Es una enorme satisfacción personal, moral y jurídica", ha confesado Jufresa, que será el único abogado de los acusados que no recurrirá al Supremo la sentencia hecha pública hoy.