Palo y zanahoria, pero mucho más palo. La cúpula socialista aprovechó este martes la vuelta a la actividad parlamentaria para pasar a la ofensiva frente al PP con un bombardeo coordinado desde el Gobierno, el partido y el Grupo, a cargo de María Teresa Fernández de la Vega, Leire Pajín y José Antonio Alonso.

Los tres dirigentes presidieron la primera reunión de los parlamentarios del PSOE con discursos coincidentes hasta la repetición en la arenga a los suyos para que se pongan las pilas ante 'el otoño que nos espera', la reivindicación del trabajo realizado y la denuncia de la estrategia de 'crispación' sin alternativas del PP.

La vicepresidenta primera y portavoz del Gobierno afirmó que los conservadores 'están subidos al monte, instalados en la más extrema radicalidad' y empeñados en 'ensombrecerlo todo y sembrar la desesperanza'.

De la Vega ahondó en la tarea de sacar a relucir las contradicciones del líder de la oposición, al que acusó de alentar una 'ceremonia de la confusión', de modo que 'estando entre sus filas los acusados, pretenden ser las víctimas' y 'poner a cero el contador de sus causas pendientes con la Justicia'. 'No sé si al señor Rajoy le parece una muestra de su digna condición de representante de todos los españoles reducir la política a un arma de destrucción masiva e intentar ensuciarlo todo para minimizar las propias miserias', concluyó.

También la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, acusó al PP de practicar 'una oposición basada en la destrucción, que dinamita de forma irresponsable los pilares más arraigados de nuestra democracia'.

Y, más templado, el portavoz parlamentario, José Antonio Alonso, alertó de que los socialistas deben tener 'mucho cuidado' con el discurso de la derecha de que quieren 'afectar a las clases medias' con la anunciada reforma fiscal. A este respecto, la vicepresidenta reiteró que será 'moderada, prudente y limitada', para 'que las rentas más altas contribuyan un poco más'. Y censuró al PP por 'agitar el espantajo de la subida de impuestos' cuando 'allí donde gobiernan los suben más que nadie'.

La troika socialista coincidió también en señalar que, a pesar del choque permanente con el PP, 'una vez más tendemos la mano para intentar hacer posible un gran acuerdo'. De la Vega concretó que debería servir 'para salir de la crisis, para ganar en educación y en medio ambiente y, sobre todo, para que la cohesión social siga fraguando los cimientos de nuestro país'.

Pajín emplazó a los parlamentarios a que salgan a la calle 'a contar y explicar' lo que hace el Gobierno y servir de 'terminales' de las inquietudes sociales.

Y los parlamentarios que tomaron la palabra lo hicieron para apoyar que se aplique 'sin complejos' una subida de impuestos a las rentas más altas, pero también para pedir que se mejore la explicación de las medidas que se adoptan.