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PP y Ciudadanos 'sellan' su pacto de Gobierno en la Asamblea de Madrid

Cristina Cifuentes e Ignacio Aguado reconocen haber dado "un primer paso positivo". PSOE y Podemos lamentan que los naranjas se hayan unido "al partido de la corrupción".

La candidata del PP a la presidencia regional, Cristina Cifuentes, saluda al también candidato de Ciudadanos, Ignacio Aguado, durante el pleno de constitución de la Asamblea de Madrid. / PACO CAMPOS ( EFE)

PAULA DÍAZ

MADRID.- Ya es oficial. Ciudadanos ocupa desde este lunes la vicepresidencia primera de la Asamblea de Madrid y ello da casi carta blanca al PP para hacerse con la Presidencia de la Comunidad.

Los líderes de ambas formaciones, Ignacio Aguado y Cristina Cifuentes, respectivamente, han hecho esfuerzos por separar lo que consideran un pacto "técnico" de lo que sería un pacto de investidura, pero en la Cámara regional ya todos, especialmente la oposición PSOE-Podemos, dan por hecha la carambola. Ni siquiera Aguado y Cifuentes han podido ocultar que se trata de "un primer paso" hacia ese fin.

"Se trata de un órgano técnico y lo que no queríamos era que sucediera lo mismo que en los últimos cuatro años, donde el PP bloqueó sistemáticamente propuestas y comisiones de investigación", se excusó un exultante Aguado, líder de Ciudadanos

"Acordamos ese asiento con el PP porque de otra forma no habríamos tenido representación en la Mesa. Se trata de un órgano técnico y lo que no queríamos era que sucediera lo mismo que en los últimos cuatro años, donde el PP bloqueó sistemáticamente propuestas y comisiones de investigación", se excusó un exultante Aguado, poco antes de que diera comienzo la votación para la nueva composición del Parlamento autonómico.

En la misma línea se mostró Cifuentes, que incidió en la idea de que el único objetivo era "que todos los grupos estuvieran representados" en el órgano de decisión más importante de la Cámara.

 

Sin embargo, la conservadora reconoció sus verdaderas intenciones. "Que haya acuerdo en la Mesa no significa que haya acuerdo de Gobierno, aunque espero que sí", se le escapó. Y le expresó a Aguado su "voluntad de asumir determinadas cuestiones programáticas" para llegar a su acuerdo deseado.

El líder regional de los naranjas, por su parte, también valoró "la buena acogida" que su documento de pacto contra la corrupción y por la regeneración tuvo por parte de los conservadores. "Hay que seguir profundizando en ello y, si lo firman, luego debatiremos sobre medidas económicas y sociales ", zanjó.

Las caras largas de González y Aguirre

En medio de la alegría no contenida de los diputados de Ciudadanos y del PP se encontraban también las caras largas del actual presidente en funciones de la Comunidad, Ignacio González, o de Esperanza Aguirre, a quien todos dan por la gran perdedora en el Ayuntamiento de Madrid. Ambos se saludaron con afabilidad y mantuvieron conversaciones con unos y con otros antes de entrar a la sala.

Quienes también se saludaron efusivamente en la puerta de la Asamblea fueron los cabeza de lista de PSOE y Podemos, Ángel Gabilondo y José Manuel López, respectivamente. La buena relación entre ellos es evidente, tanto como lo es su enfado con PP y Ciudadanos por el acuerdo al que han llegado.

Gabilondo lamentó el intercambio de sillas aceptado finalmente por los naranjas, y negó parte del discurso de Aguado. El líder de Ciudadanos aseguró que "todos los grupos" estaban de acuerdo en que "todos" estuvieran representados Mesa, pero afirmó que "nadie más que el PP" se lo ofreció. El líder de los socialistas le desmintió: "Nosotros desde el primer momento hablamos en esa dirección", aseguró. Y lamentó la composición actual de la misma (3-PP; 2-PSOE; 1-Podemos; 1-Ciudadanos): "No nos parece mal, pero nosotros queríamos otra cosa", sentenció.

Mas específico fue López, que explicó que Podemos había abogado por un 2-2-2-1. "Queríamos que nadie tuviera la mayoría, pero no ha habido cambios", se quejó, "preocupado" por que Ciudadanos haya dado ya el Gobierno de la Comunidad al PP, "el partido de la corrupción". "Se ve que Albert Rivera es el único que sigue creyendo que Aguirre fue quien destapó la Púnica", ironizó.

 

Gabilondo, sobre el posible pacto de Gobierno entre C's y PP: "No se puede ser tan ingenuo como para no ver que cuando se da un paso, se echa a andar"

Con ello, dio por hecho lo mismo que todos aventuran: que la vicepresidencia de Ciudadanos en la Asamblea implica la presidencia del PP en el Ejecutivo regional. Igual que Gabilondo, que lo resumió con una metáfora: "No se puede ser tan ingenuo como para no ver que cuando se da un paso, se echa a andar". 

Primera polémica para Podemos

Al margen de las carambolas de las negociaciones técnicas y de Gobierno, la inauguración de la nueva Asamblea no ha estado exenta de polémica. Los diputados de Podemos recibieron su primer abucheo de parte de la bancada popular, especialmente.

¿El motivo? Haberse saltado la 'norma mayoritaria' de jurar el cargo y elaborar, además, una nueva para prometerlo: "Sí, prometo para poner las instituciones al servicio de la gente". O su secuela, un poco más errónea: "Sí, prometo hasta que devolvamos las instituciones al pueblo", dijeron uno tras otro.

Otra de las anécdotas de la jornada la protagonizó también el grupo de José Manuel López. Y es que gran parte de sus diputados, jóvenes y rebeldes, se negaron a vestir de traje para romper la etiqueta habitual que una norma no escrita ha impuesto en las instituciones públicas. Puede que incluso fuera la primera vez que unas rastas entraban en la Asamblea de Madrid. El propio Miguel Ardanuy —a quien le ha tocado presidir la sesión constitutiva por ser el miembro más joven— presumió de ello: "Es la prueba de la diversidad, de la apertura de esta Cámara", bromeó con los medios de Comunicación.

Todos los líderes de los partidos recordaron a Pedro Zerolo, que murió justo el día en que debía jurar su cargo de diputado

Uno falta, uno 'sobra'

Entre bromas, también hubo sitio para la tristeza. Y es que el socialista Pedro Zerolo ha fallecido justo el día en que le tocaba jurar su cargo de diputado. Todos lamentaron la pérdida del número tres de la lista de Gabilondo.

Y, mientras uno faltaba; otro 'sobraba'. O al menos así lo consideraba hasta hace poco la agrupación regional de Ciudadanos. Se trata de Álvaro Ballarín, el número siete de Cifuentes y que fue imputado y desimputado en cuestión de horas después de las elecciones. Era la piedra mayor en el zapato de las negociaciones entre ambos, al menos, hasta ayer. Pero la Fiscalía, que parece no querer decidirse sobre si recurre el archivo de su causa o no, les ha dado un respiro. Y el pacto sigue adelante.

El nuevo "árbitro", ex de Villarmir

El primer punto del acuerdo ha sido, como ya se ha explicado, que Ciudadanos tenga la vicepresidencia de la Mesa. Y el diputado elegido para tal responsabilidad es Juan Trinidad Martos, que ejercerá de "árbitro entre la izquierda y la derecha", presumió Aguado, destacando el "talante" de su compañero de filas.

El número ocho de Ciudadanos, por su parte, explicó que su misión será la de "buscar el consenso". "Por ser el partido de centro, evitaremos que se formen bloques PP vs. PSOE-Podemos", dijo.

Juan Trinidad se presentó ante los medios como un recién llegado a la política. Es un licenciado en Derecho que ha trabajado "toda" su vida "en la empresa privada". En concreto, fue miembro de la asesoría jurídica del Grupo Villarmir, cuyo presidente, Juan Miguel Villar Mir, está imputado en el caso Bárcenas por haber realizado, presuntamente, donaciones ilegales al PP.

La nueva presidenta de la Asamblea será la conservadora Paloma Adrados, exconsejera de Empleo con el Gobierno de Aguirre.

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