Público
Público

BBK y Kutxa debaten la fusión que aparentemente depende de un voto

EFE

La BBK y la Kutxa celebran hoy sus asambleas extraordinarias para decidir el respaldo al proceso de fusión de ambas entidades, que, aparentemente, depende de un único voto en el cónclave de la guipuzcoana.

La operación impulsada por los presidentes de ambas entidades, Xabier Irala (BBK) y Xabier Iturbe (Kutxa), contó desde el principio con el respaldo de PNV y EA, que en negociaciones posteriores llegaron a un acuerdo con los sindicatos CCOO y Pixkanaka y en los últimos días han conseguido también el apoyo de Aralar y Ezker Batua.

En contra de la fusión han anunciado que votarán el PSE-EE, PP, ANV, los sindicatos ELA y LAB y la agrupación de impositores de la izquierda abertzale Banatuz.

De acuerdo con estas posiciones, la fusión será aprobada por una amplia mayoría en la asamblea de la BBK, mientras que en el caso de Kutxa los defensores de la operación estarían a un voto de conseguir la mayoría necesaria de dos tercios en el caso de que acudan los cien compromisarios, ya que la asamblea está formada por 51 representantes de PNV y EA, 18 del PSE-EE, 9 de CCOO, 8 de Banatuz, 3 del PP, EB y ANV, 2 de Pixkanaka y 1 de Aralar, ELA y LAB.

Fuentes de Kutxa han reconocido a Efe que se están celebrando negociaciones de "último minuto" para tratar de garantizar la fusión y mantienen su "confianza" en lograr los apoyos necesarios para lograr la integración, para lo que necesitan un voto más o bien la ausencia en la asamblea de un compromisario opuesto, con lo cual la mayoría de dos tercios se reduciría a los 66 votos que suman PNV, EA, CCOO, Pinxkanaka, EB y Aralar.

Para añadir más incertidumbre, en la asamblea de Kutxa el voto, a petición del PSE y de la izquierda abertzale, será secreto, por lo que podría haber compromisarios que no respetasen la orientación de voto dada por su grupo. En la BBK, en cambio, el voto será nominativo.

De salir adelante el acuerdo, la nueva entidad, que se llamará Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Euskadi y adoptará la marca comercial "Kutxa", comenzará a funcionar como tal con el nuevo año.

El proyecto, según han repetido los presidentes de ambas entidades, queda abierto a la integración de la alavesa Vital, "en el momento que sus órganos de gobierno lo decidan".

La nueva caja, según el acuerdo entre ambas entidades, tendrá su domicilio social en Bilbao y dos sedes: la de la capital vizcaína para la actividad económico financiera y la de San Sebastián para la obra social.

La aportación de la BBK a la nueva entidad será del 60% y la de la Kutxa del 40%, porcentajes calculados "en función de los activos totales consolidados, solvencia en términos de patrimonio neto consolidado, rentabilidad en términos de beneficio neto atribuido al grupo y obra social en términos de aportación anual a la misma".

El acuerdo establece un compromiso de inversión en obra social del 30% del beneficio anual.

La nueva caja contará con unos activos totales de 49.943 millones de euros, un beneficio de 523 millones y un patrimonio neto de 7.434 millones de euros.

Será una caja con una importante participación industrial: Iberdrola (7,2%), CAF (17%), Banco Guipuzcoano (24,5%), Euskaltel (56,1%), Petronor (14%), Enagas (5%) y Red Eléctrica Española (2,2%), entre otras muchas.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias