El proyecto de ley casi definitivo sobre la prohibición del uso del velo integral prevé una multa de 150 euros para las personas que oculten su cara en un espacio público y hasta un año de prisión y 15.000 euros de penalización para aquellas que les obligan.

Estas informaciones, desveladas el viernes por el diario Le Figaro, fueron confirmadas a Reuters por una fuente cercana a la elaboración de la ley.

El texto será presentado por la ministra de Justicia, Michèle Alliot-Marie, al consejo de ministros el 19 de mayo. El primer ministro, François Fillon, ha solicitado a los diputados que conforman la mayoría que la norma sea adoptada definitivamente a mediados de septiembre.

"Estipula una multa de segunda clase para la persona que disimula su rostro y un delito penado con un año de prisión y 15.000 euros para una persona que obliga a un tercero a disimular su rostro", dijo la fuente.

El jueves, los diputados belgas aprobaron por una amplia mayoría prohibir el burka en los lugares públicos.

El proyecto de ley francés debería comprender siete artículos.

Según Le Figaro, que dijo que tuvo acceso al texto, el primero estipula que "nadie puede, en el espacio público, llevar una ropa que le disimule el rostro".

El segundo prevé que imponer a una persona que oculte su cara por medio de "violencia, amenaza, abuso de poder u autoridad" será un delito punible con un año de prisión y 15.000 euros de multa, explicó el diario.

El presidente Nicolas Sarkozy ha defendido estrictamente la prohibición, argumentando que el velo musulmán afecta a la igualdad de género y degrada a las mujeres.

Un sondeo publicado la semana pasada mostró que un 33 por ciento de los franceses desea un veto absoluto, mientras que más de un 31 por ciento quiere una ley más diluida que se aplique sólo a ciertos espacios públicos.