El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha acordado suspender de sus funciones durante cinco meses a la titular del juzgado de lo penal número 1 de Motril (Granada), Adelina Entrena, por haber usado su cargo para obtener ventajas injustificadas y favorecer a su ex pareja.

Según ha informado el máximo órgano de gobierno de los jueces, el pleno ha decidido imponer a Entrena, por doce votos frente a cuatro, la citada sanción como autora de una falta muy grave de abuso de la condición de juez para obtener trato favorable e injustificado de autoridades, funcionarios o profesionales.

Esta falta está prevista en el artículo 417.13 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ).

El pleno ha elevado la sanción a imponer a dicha juez, puesto que la comisión disciplinaria proponía para ella una sanción de tres meses de suspensión y el servicio de inspección la de seis meses y un día.

La suspensión de funciones por más de seis meses acarrea la pérdida de destino.

Los hechos por los que ha sido sancionada la juez tuvieron lugar el pasado año cuando pidió a la secretaria de su juzgado que pusiera "a la cola de los demás juicios" una vista que tenía su ex pareja.

Entrena denunció por amenazas a su ex pareja, causa de la que ella se abstuvo, y posteriormente "intentó conseguir favorecer al imputado sustrayendo el procedimiento de la normal tramitación que venía acordada con el objeto de ralentizarlo", lo que ha negado la propia juez.

Según el informe del servicio de inspección, la juez "abusó de su condición (..) para obtener de la secretaria judicial una ventaja injustificada cual es darle al proceso la tramitación que a ella le interesaba y que se demorase su celebración, ventaja que hubiese sido imposible obtener si hubiese actuado como particular".

El pasado 20 de junio, el CGPJ ya abrió otro expediente a esta juez, ya que olvidó ordenar la libertad de tres presos, a uno de los cuales, tras haberlo absuelto, mantuvo durante 437 días en prisión por un delito de robo.