El titular del Juzgado de lo Mercantil número dos de Bilbao, Edorta Etxarandio, ha decidido mantener las medidas cautelares para la eléctrica francesa EDF y, por lo tanto, le ha obligado a hacer públicos sus planes sobre Iberdrola.

Según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, el juez ha adoptado esta resolución, en la que se reafirma en las medidas adoptadas en su auto del 25 de marzo, tras la vista celebrada hace diez días para escuchar las alegaciones de ambas partes.

Además, el juez ha establecido un plazo de cinco días para presentar recurso de apelación contra esta última resolución y ha impuesto las costas del juicio a la compañía francesa.

El auto del 25 de marzo obligaba a EDF a publicar en cinco periódicos (tres españoles y dos extranjeros) anuncios en los que debía especificar si había iniciado o preparaba la adquisición de Iberdrola mediante la compra de acciones o derivados financieros, por sí sola o de manera concertada con terceros, a los que tenía que identificar.

Según ha argumentado el juez en su nuevo auto, las medidas se adoptaron ante la "hipótesis" de "una estrategia empresarial de obstaculizar el proyecto de Iberdrola como fórmula de asedio a su control", basada en la "desinformación" y en la confusión que generó la compañía francesa cuando aportaba explicaciones contradictorias sobre sus posibles planes de compra de la eléctrica española.

Etxarandio ha vuelto a exigir a EDF que aclare sus intenciones, "aún siendo verdad" que la pretensión de la demanda de Iberdrola sobre un supuesto delito de competencia desleal fuera precisamente obtener, a través de la aplicación de las medidas cautelares, la información sobre el proyecto de la francesa y lograr conocer sus planes.

Así, el juez ha dado la razón a Iberdrola al considerar que la incertidumbre puede afectar a su posición en el mercado, el valor de los acciones y a su organización interna.

Ha criticado que EDF se presente como "una gran corporación de capital público, que se defiende con despliegue de destrezas respecto a las reclamaciones de otra empresa de capital privado, mientras no cumple su mandato judicial" y, aún peor, según ha criticado el juez, "no tiene ninguna intención de cumplirlo".

Según ha argumentado, EDF se ve favorecida por "el desconcierto prolongado del mercado", antes de "adoptar un programa" que puede ser "una opa" o una adquisición de activos, pero ha aclarado que la intención del juez no es "vetar" el proyecto que pueda tener en el mercado español, sino que "cese" en la "exageración temporal" de las "conversaciones exploratorias" por su efecto en la empresa vasca.