Modern Family, la disparatada comedia de la cadena ABC que emite Neox los martes en prime time, fue la gran vencedora de la 63 edición de los premios Emmy, que se celebró la madrugada del lunes en Los Ángeles. La serie se alzó con los galardones a la mejor comedia, guión, dirección, y actor y actriz secundarios. Esta sitcom, que se estrenó en EEUU en septiembre de 2009, refleja la vida de tres familias muy diferentes desde la ironía y el humor. Creada por Steven Levitan y Christopher Lloyd, responsables de otro título emblemático como Frasier, Modern Family revalida así el título de mejor comedia que consiguió por primera vez en 2010.

También repitió galardón Mad Men, que por cuarto año consecutivo logró el Emmy a la mejor serie dramática. Fue, no obstante, el único gran premio que cosechó esta producción de la cadena AMC. Por su parte, Boardwalk Empire y Downton Abbey cosecharon hasta 13 premios, la mayoría de ellos en categorías técnicas. Una de las grandes sorpresas de la noche la protagonizó la serie Friday Night Lights, en la que Kyle Chandler se impuso como mejor actor de drama. La serie, que no partía como favorita en las quinielas, también logró el premio al mejor guión dramático.

'Boardwalk Empire' y 'Downton Abbey' cosechan 13 premios

La polémica de la ceremonia llegó de la mano del actor Alec Baldwin, quien no asistió a la gala después de que la cadena de televisión Fox, propiedad de Rupert Murdoch y encargada de retransmitir la ceremonia, censurase una broma del actor sobre el magnate australiano y los recientes casos de espionaje que han salpicado a su grupo de comunicación. Baldwin, ganador de dos Emmy por su papel en 30 Rock, lo explicó en su cuenta de Twitter: 'Fox cortó mi broma sobre NewsCorp y eso apesta porque creo que les habría hecho quedar mejor'.