El británico Andy Murray fue el encargado de 'desterrar' de Roland Garros al francés Richard Gasquet, que venía de ganar el domingo el torneo de Niza ante el español Fernando Verdasco, al derrotarle por 4-6, 6-7 (5), 6-4, 6-2 y 6-1 en la primera ronda.

Tocado en el muslo izquierdo, agotado por el calor, después de un tormento de cuatro horas y cuatro minutos, con 30 grados centígrados de temperatura, Gasquet, la mejor esperanza del tenis francés este año, se fue de París con la derrota bajo el brazo, hundido físicamente.

Hasta el segundo set, el discípulo del argentino Gabriel Markus hizo una exhibición general del juego de tierra. Su revés liftado a una mano hizo temblar la pista Suzanne Lenglen, donde mañana debutará el español Rafael Nadal ante el francés Gianni Mina, y sus dejadas volvieron loco a Murray.

Con el presidente de la Federación Francesa de Tenis, Jan Gachassin, en las gradas, animando en mangas de camisa como lo hizo en la final de Niza ante Verdasco el domingo, Gasquet deleitó al público con su tenis de clase. Pero solo hasta que las fuerzas le abandonaron.

"No puedo más, no puedo más", se leía en los labios del francés, mientras le suministraban una pastilla al final del tercer set que apenas masticó y que escupió después. Un largo masaje en el muslo izquierdo le permitió seguir adelante, pero Murray ya se sabía ganador y combinó dejadas y globos para destrozarle y apuntillar su victoria con decimoséptimo "ace" al que ni siquiera hizo ademán de restar Gasquet.

Si en la primera jornada, su compatriota Jo-Wilfried Tsonga se salvó de milagro ante el alemán Daniel Brands, Francia perdió hoy a dos de sus baluartes, Gasquet, y Paul Henri-Mathieu, que abandonó ante el español Marcel Granollers cuando perdía 2-0 en el tercer set por problemas digestivos.

El suizo Roger Federer, defensor del título, y la estadounidense Serena Williams, número uno del mundo, no dejaron dudas en su debut. Federer machacó al australiano Peter Luczak, 6-4, 6-1 y 6-2, cometiendo solamente once errores no forzados, y cediendo únicamente 14 de los 64 puntos de su servicio, con una sola posibilidad de rotura en todo el encuentro.

"Siempre es importante, cuando se trata de defender un título, tener un buen comienzo", dijo Federer.

"Ha sido un partido perfecto para abrir la campaña del Abierto Francés", añadió el suizo, que por segunda vez en nueve años ha llegado a París sin ganar un torneo en la sesión de tierra batida.

Serena, ganadora en 2002, ha perdido dos de sus últimos tres partidos en tierra antes de llegar a Roland Garros, pero hoy utilizó su agresividad y su servicio (diez directos), para doblegar a la suiza Stefanie Voegele, por 7-6 (2) y 6-2.

Avanzaron también a la segunda ronda, el serbio Novak Djokovic (3), al vencer al ruso Evgeny Korolev por 6-1, 3-6, 6-1 y 6-3

En el cuadro femenino, además de Serena, avanzaron la danesa Caroline Wozniacki (3), la china Na Li (11) y las rusas Elena Dementieva (5) y Dinara Safina (24), además de las serbias Ana Ivanovic, campeona en 2008, y Jelena Jankovic (4).

Federer estuvo tranquilo, a excepción de un momento dado, cuando discutió con el juez de silla Emannuel Joseph en francés un servicio de Luczak.