180 científicos de universidades y centros de investigación catalanes e internacionales han firmado un manifiesto contra la candidatura de los Juegos Olímpicos de Invierno 2030 y cualquier otra en los próximos años, que consideran "inaceptable" por su impacto negativo a nivel ambiental, social y económico. "Los Juegos no aportarán riqueza a los Pirineos", señala el texto.

En una rueda de prensa en Barcelona, cuatro de los científicos firmantes han advertido de los "riesgos" del proyecto sobre los Pirineos en el contexto de emergencia climática actual, especialmente en lo que se refiere al aumento del consumo de energía y agua, las emisiones de CO2 y la contaminación, así como las consecuencias sobre la biodiversidad.

Además, consideran que no tendría un impacto económico positivo en los Pirineos y podría "agravar el desequilibrio y la dependencia" de las comarcas afectadas por un mayor enfoque hacia el turismo masivo y las infraestructuras radiales. "Los Juegos Olímpicos son insostenibles ambiental, económica y socialmente", advierte el texto.

Inviables sin nieve artificial

A nivel ambiental, Ermengol Gassiot, arqueólogo de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), ha advertido que "la mayoría de estaciones de esquí serán inviables sin nieve artificial entre 2030 y 2050". En 2030 la mayoría de estaciones catalanas tendrán "problemas de viabilidad", algunas de ellas también con nieve artificial debido al aumento estimado de temperaturas de entre uno y 2,7 grados.

Producir más nieve artificial comportará un aumento de gasto energético y de agua "evidente", así como más emisiones de CO2 y obras de infraestructuras. "Los Juegos Olímpicos de Invierno en el Pirineo con las condiciones actuales difícilmente serán verdes o ecológicos", ha dicho Gassiot.

Asimismo, los científicos lamentan que la propuesta sea "poco transparente" y no cuente con un plan de implementación concreto, con el correspondiente documento de evaluación ambiental.

"El objetivo del manifiesto es hacer accesibles estos datos a la ciudadanía y a las instituciones para alertar del impacto de los Juegos en la situación actual", ha asegurado Ariadna Nieto, investigadora en arqueología de la Universitat de Lleida. Una de ellas es que el PIB de las regiones que han acogido este tipo de proyecto puede reducirse hasta un 2,7% en comparación con el PIB nacional.

Los motivos son varios, como por ejemplo la reducción del turismo habitual durante el tiempo en el que se llevan a cabo, la capacidad limitada para atraer visitantes o un impacto económico local "escaso" debido a la generación de trabajo "precaria" y a través de empresas de fuera del territorio. Además, los científicos recuerdan "la falta de rentabilidad económica de las estaciones de esquí catalanas", siete de las cuales han sido rescatadas por la Generalitat y tienen un déficit de 74 millones de euros.

Planificación estratégica sostenible

Los científicos rechazan no sólo esta candidatura sino "el modelo genérico de desarrollo que se lleva a cabo en los Pirineos desde hace años". Apuestan por una planificación estratégica enfocada al fomento de la "gestión sostenible" de los recursos naturales, por ejemplo la ganadería extensiva y la agricultura "en pequeño formato" que "ha sostenido a la población de los Pirineos muchos años", ha explicado Federica Ravera, investigadora en Ciencias ambientales en la Universitat de Girona.

Otra de las consecuencias negativas de la construcción de infraestructuras y la ampliación de pistas de esquí sería la afectación de la biodiversidad, con la modificación de ecosistemas y caudales hídricos, por ejemplo, y también podría "poner en riesgo la preservación de yacimientos arqueológicos" presentes en la zona. "Ahora ya hay multitud de especies amenazadas, y los juegos agravarían las tendencias que ya tenemos ahora mismo", ha concluido Andreu Ubach, investigador en ecología de mariposas diurnas en el Museo de Ciencias Naturales de Granollers.