"Estamos acostumbrados a los incendios, pero lo de este verano ha sido una animalada". Samuel es uno de los pocos vecinos de A Caridade (Ourense), una aldea de menos de 50 habitantes a media hora de la frontera con Portugal. El fuego lo dejó sin casa, sin coche y sin tractor, también sin recuerdos. Lo ha perdido todo. "Me quedé con lo puesto, unos pantalones y una camiseta", recuerda en una conversación con Público. El vacío emocional es prácticamente irreparable. Y para la reconstrucción de los daños materiales solo puede confiar en los recursos que pongan a su disposición las distintas administraciones implicadas en la emergencia. Le cuesta, pero quiere confiar. "Lo que está claro es que no basta con 15.000 euros", reconoce. 

Esta es la "cuantía máxima" de los subsidios por "destrucción total de vivienda habitual" que contempla –en circunstancias ordinarias– el Gobierno. El Consejo de Ministros ha acordado este martes abrir el procedimiento para que todos los "damnificados" por "una de las mayores catástrofes medioambientales de los últimos años" puedan solicitar las ayudas previstas en la Ley 17/2015 del Sistema Nacional de Protección Civil. Los desembolsos no superan –sobre el papel– los 15.120 euros. "Existe una concreta desactualización en las cuantías", ha reconocido en rueda de prensa el ministro Fernando Grande-Marlaska. 

Las llamas arrasaron en A Caridade una veintena de casas, algunas, eso sí, deshabitadas. "No te hablo de los electrodomésticos ni de los muebles, te hablo de la estructura. La casa necesita paredes y un tejado. Me dicen que se puede reconstruir, y eso espero, pero no va a salir barato", lamenta Samuel. El vecino prefiere no pensar en la posibilidad de tener que buscar un nuevo hogar en el actual mercado inmobiliario. 

El precio medio de la vivienda libre se ha disparado un 12,2% interanual en el primer trimestre de 2025, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Los registros cumplen así once años de subidas ininterrumpidas, y no solo en las grandes ciudades, también en las comunidades afectadas por esta última ola de incendios: comprar una casa en Extremadura es ahora 33 veces más caro que hace una década, mientras que en Galicia y Castilla y León los precios han crecido de media más del 50%. "La vida se ha encarecido, pero las ayudas siguen igual. ¿Cómo es posible?", se pregunta el gallego. 

Los subsidios, pendientes de una actualización

El Ministerio del Interior insiste en una conversación con Público en la necesidad de "actualizar" los importes que contempla el real decreto 307/2005 y dice estar "trabajando" en las "modificaciones", incluso desde antes de los incendios. "Esto lo tiene que convalidar el Congreso", recalcan, sin embargo, fuentes de la cartera. Es precisamente por este motivo, para "agilizar los trámites" y conseguir que el dinero llegue antes a los bolsillos de quienes lo han perdido todo, que, mientras no se materialicen los cambios, utilizarán reales decretos ley para ensanchar los subsidios, "como se hizo en otras emergencias puntuales". La última palabra para sacar adelante la reforma del reglamento, además, la tendría Hacienda, toda vez que debería autorizar el aumento de las cantidades y los pagos. 

Los ejemplos del volcán y la DANA

La DANA y la erupción del volcán de La Palma son dos de las catástrofes más recientes en las que Interior ha apostado por esta vía, la de los reales decretos ley, para transferir las correspondientes prestaciones. El Ministerio, de hecho, pone ambos casos como ejemplo. "El procedimiento será casi seguro el mismo [para las ayudas tras los incendios]", precisan las mismas fuentes al ser preguntadas por este diario. El Gobierno aprobó mediante un real decreto ley elevar hasta los 60.480 euros la cuantía máxima de las ayudas por "destrucción total de la vivienda habitual" durante las inundaciones del pasado mes de octubre en el País Valencià. Las familias con inmuebles afectados de manera no estructural han podido reclamar un desembolso de 20.640 euros y las que sufrieron daños en electrodomésticos esenciales, pagos de hasta 10.320 euros. Este es el camino a seguir para impulsar la reconstrucción y reparar los daños causados por los devastadores fuegos de este verano. 

El Centro Nacional de Seguimiento y Coordinación de Emergencias (CENEM) de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias ha registrado 118 emergencias en los últimos dos meses: 113 corresponden a incendios forestales en una quincena de comunidades (Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Catalunya, Comunidad de Madrid, País Valencià, Extremadura, Galicia, Illes Balears, La Rioja, Navarra y Región de Murcia) y los siete restantes tienen que ver con riadas e inundaciones provocadas por episodios de lluvia intensa a finales del pasado mes de junio. Los ciudadanos de las localidades afectadas que hayan sufrido daños personales y/o materiales en viviendas y enseres podrán acogerse al paquete de ayudas directas que ha anunciado este lunes el Ministerio del Interior. El Gobierno no decarta además aplicar más medidas y bonificaciones a través de otros ministerios, como rebajas fiscales, prestaciones laborales y dotaciones para las corporaciones municipales.