Sonrisas en Donostia, rostros compungidos en Bilbao. Las sedes principales de EH Bildu y PNV respectivamente han servido de termómetro ideal en las últimas horas para medir la temperatura vasca tras la noche electoral. Más allá de la expresión facial de los representantes políticos, hay una idea que a esta hora recorre las salas de reuniones de ambas formaciones: algo ha cambiado en Euskadi. 

La celebración ha dado paso al análisis sosegado en las oficinas de EH Bildu. La formación vasca ha logrado los mejores resultados de su historia y lleva su número de concejales a máximos nunca vistos. Hoy la izquierda soberanista se fortalece en municipios donde ya gobernaba y crece exponencialmente en lugares como Vitoria, Bilbao o Donostia. Y eso, en Euskadi, significa una amenaza a la aparentemente indestructible hegemonía del PNV.

"Vemos que se abre un nuevo ciclo y empiezan a cambiar las cosas en términos estructurales", afirma Jule Goikoetxea, filósofa política y profesora de la Universidad del País Vasco (UPV-EHU).

A su juicio, los resultados de este domingo señalan que el PNV "mantiene la hegemonía mediática e institucional, pero está perdiendo la hegemonía cultural en términos más amplios: hay una buena parte de la población que está identificando a EH Bildu y no al PNV con el progresismo".

Frente amplio

Tras la reunión de la Mesa Política celebrada este lunes, Arnaldo Otegi, coordinador general de EH Bildu y uno de los rostros más conocidos del independentismo vasco, habló precisamente de un "cambio tranquilo" a nivel estructural, liderado por la coalición abertzale. Un cambio que, según la hoja de ruta de la formación, pasa por buscar "alianzas amplias" o, en otras palabras, en apostar por ese "frente amplio" que se mira en el espejo de la izquierda uruguaya y que en el caso vasco busca situar a EH Bildu como la casa de una izquierda abarcadora.

"Parece claro que EH Bildu ha sacado un rendimiento muy importante de su participación en la gobernabilidad a nivel estatal", afirma por su parte Asier Blas, profesor de Ciencia Política de la UPV. En esa línea, apunta que la formación ha mejorado sustancialmente sus resultados en el Gran Bilbao, Vitoria y Navarra, unas zonas "donde el debate estatal ha tenido siempre más repercusión".

No en vano, la coalición soberanista ha logrado captar votos que se situaban en el ámbito de Elkarrekin Podemos y que ahora suman a favor del proyecto que lidera Arnaldo Otegi. "Hay un crecimiento a raíz de un traslado de votos de Elkarrekin Podemos y de un aumento de la abstención, que evidentemente no le ha perjudicado y le hace que crezca porcentualmente", resume Blas.

El profesor de la UPV subraya que la bajada principal de la coalición morada ha tenido lugar en Bizkaia, donde ha perdido unos 25.000 votos. "Una parte pequeña habrá ido al PSE, pero la mayor parte ha ido a favor de EH Bildu", explicó.

Las elecciones de julio

Ahora entra en juego otro factor: la convocatoria de elecciones generales anticipadas que ha anunciado Pedro Sánchez. Para Blas, se trata de un escenario que previsiblemente beneficiará a EH Bildu, que podría acaparar "todo el voto útil situado a la izquierda del PSOE". "Ahí se confirmará el cambio de ciclo", remarcó.

"Habrá que ver qué pasa en las (elecciones) estatales. Si ganan PP y Vox van a cambiar muchas cosas y afectará a todos los partidos de las nacionalidades periféricas, incluido también el PNV", destaca por su parte Goikoetxea.