El consejero delegado y el director financiero de Yell dejarán sus cargos tras evitar la insolvencia de la compañía de guías telefónicas y el valor caía esta mañana un 21 por ciento en bolsa.

Yell no ha nombrado todavía los sustitutos de John Condron, consejero delegado que se jubila después de 30 años en la empresa, y de John Davis, director financiero que dejará la compañía después de 10 años.

Yell, que tiene rivales online que incluyen a Google, dijo que espera que el prolongado descenso de sus ingresos disminuya este trimestre, pero no dio previsiones de beneficios ante la debilitada confianza entre su base de clientes de pequeñas empresas.

"Aunque su confianza está mejorando, nuestros clientes siguen nerviosos a la hora de aumentar sus gastos en publicidad", informó Yell, que obtiene la mitad de sus ingresos en EEUU, el 30 por ciento en Reino Unido y el resto en España y América Latina.

A las 1016 horas GMT, Yell caía más de un 21 por ciento a 37,18 peniques.

"Mantenemos nuestra opinión de que dada la incertidumbre cíclica, estructural y ahora directiva, junto con un apalancamiento muy alto, el grupo sigue siendo una inversión de muy alto riesgo", dijeron en una nota los analistas de Numis.

Yell informó de que redujo su deuda neta en 1.100 millones de libras en el último año fiscal a 3.100 millones de libras, equivalente a 4,9 veces su Ebitda.

En ese período, Yell anunció una caída del 14 por ciento de sus ingresos y del 26 por ciento de su beneficio neto. Ambas cifras coincidieron con las previsiones de los expertos. La empresa indicó que prevé que el descenso de sus ingresos se reduzca al 11 por ciento este trimestre.

Su rival en EEUU, Dex One, que superó una reestructuración de acuerdo con el capítulo 11, anunció en marzo una previsión de caída de las ventas de publicidad en 2010 del 12 al 15 por ciento.

Las acciones de Yell habían subido un 19 por ciento desde el inicio de 2010, superando el comportamiento del índice europeo de medios de información en un 21 por ciento.