El presidente del Gobierno 'evitará dar su brazo a torcer, se lo aconseje quien se lo aconseje', en materia de despidos. Así de gráfico lo explicaba un alto cargo de su Gabinete durante la rueda de prensa en el palacio presidencial de Abuja (Nigeria), cuando hubo de responder a la pregunta sobre las recomendaciones del presidente del Banco Central Europeo (BCE).

Efectivamente, José Luis Rodríguez Zapatero reiteró ayer, y con firmeza, que ni en su programa de Gobierno ni en el programa electoral ni en el del debate de investidura 'figura el abaratamiento del despido'. Por tanto, ni se abaratará ni habrá reformas laborales que restrinjan los derechos sociales de los trabajadores. 'Los programas están para ser cumplidos y yo los voy a cumplir', sentenció.

Jean-Claude Trichet abogó este lunes por una reforma laboral y la moderación salarial en España para frenar el paro. Para el actual mando del BCE, el coste de la protección laboral es 'excesivamente oneroso' para los empresarios.

Zapatero, visiblemente contrariado con las palabras de Trichet, le recordó que 'es muy distinto ser gobernador de un banco central que presidente del Gobierno', y aunque aseguró que respeta todas las opiniones, 'una cosa es opinar como experto y otra gobernar para la ciudadanía. Son cosas bastante distintas', concluyó.

Diálogo social abierto

El jefe del Ejecutivo se refirió también, aunque en un tono menos contundente, a lo dicho por el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien insistió en la necesidad de reformas en el mercado laboral. Zapatero le respondió que ya hay 'un proceso de diálogo social abierto entre sindicatos, empresarios y el Gobierno', y expresó su confianza en alcanzar un 'acuerdo positivo' que cubra las actuales precariedades del mercado laboral.

Al Ejecutivo, según su presidente, le interesa un acuerdo social que acelere el cambio de modelo productivo, reforme la formación profesional y fortalezca la educación. 'Son los tres pilares necesarios para mejorar las cosas', explicó. Y en eso está el Gobierno.