A Juande Ramos no le va a dar tiempo ni a deshacer las maletas, hoy estará presente en el partido que disputará el Tottenham frente al Blackburn Rovers en White Hart Lane. Su nuevo equipo ocupa puestos de descenso y la afición está de uñas contra sus jugadores. Juande aterriza millonario en Londres, pero en un equipo abatido por la pobreza de fútbol y resultados.  

Robbie Keane, uno de los pesos pesados del vestuario que  espera a Juande como un salvador, reconoce que el equipo pasa por un momento delicado: “Todos en la plantilla estamos convencidos de que nuestro destino cambiará pronto a mejor, pero también somos conscientes de que depende de nosotros que esto pase antes o después”.

El propio Keane ha realizado un llamamiento a la afición por medio de la página web del club, desechando la teoría de que jugar delante de los seguidores pueda suponer un extra de presión para el equipo.

Guerra congelada

Mientras, la estela de Juande Ramos se ha alejado del Sánchez Pizjuán a velocidad sideral. Ha sido protagonista de los éxitos del Sevilla en estos dos últimos años, ha esculpido en letras de oro su etapa como entrenador sevillista, pero el presidente José María del Nido se preocupó ayer de rociar con disolvente la repentina marcha del técnico manchego a la liga inglesa: “Ya no se vuelve a hablar de Juande Ramos en esta sala de prensa. Pese al grave daño causado, no voy a hablar más de Juande Ramos. Más adelante, ya hablaremos”.  

Unas horas antes, los dos grandes protagonistas de esta historia se estrecharon la mano por última vez. Juande acudió al estadio para despedirse de sus jugadores antes de marchar hacia Londres. Acompañado de su mujer y del preparador físico, Marcos Álvarez, que también se marcha al Tottenham, el manchego se cruzó con Del Nido y, según asegura la página web oficial del club, se dieron la mano, se abrazaron y a Juande se le saltaron las lágrimas. Todo muy entrañable, pero seguro que a medida que pase el tiempo la cordialidad aparente entre estos dos personajes se agriará. Queda por descifrar quién será el primero que disparará.

El vestuario no estalla

De momento, se mantienen las buenas maneras. Javi Navarro, capitán de la plantilla sevillista, expresó su “respeto” por la decisión del hasta ahora entrenador. El defensa aseguró que “el fútbol tiene estas cosas” y apuntó que el equipo “mira al futuro y no tiene por qué resentirse porque la línea de trabajo va a ser la misma”. “El técnico ha tomado esta decisión. Hay que respetarla y desearle que le vaya muy bien”, dijo el central.

El director deportivo, Monchi, admitió que los dos últimos días “han sido convulsos porque nadie esperaba la dimisión”.

Durante la noche del viernes, los acontecimientos se sucedieron uno tras otro. El Sevilla cedió al técnico el marrón de comunicar la noticia. Algo así como “ya que te vas así, pues príngate tú”. Del Nido ya lo dijo sin decirlo en su comparecencia en una peña y minutos después Juande apareció en el estadio para presentar un documento con la rescisión unilateral de su contrato sin justa causa al amparo del Decreto 1006/85.

Rehusó comparecer en rueda de prensa y colgó un comunicado de despedida en su página web. Un detalle que explican sus últimas semanas con Del Nido.