Vislumbrar caminos más justos de desarrollo y criticar las políticas de la presidencia española de la Unión Europea que 'suponen un ataque contra los derechos humanos'. Con estos dos objetivos, medio centenar de movimientos sociales inaugurarán hoy en Madrid la Cumbre de los Pueblos, un contraencuentro a la reunión UE-América Latina que se celebra en la capital española a partir del próximo lunes y que arranca este fin de semana con la cumbre bilateral con México .

Se trata de denunciar la 'responsabilidad y los abusos de la UE' en las 'violaciones de los derechos humanos' que provocan los estados de la Unión en Suramérica 'de forma directa, contribuyendo a agudizar el cambio climático, o de forma indirecta, con las políticas que desarrollan allí las empresas europeas', advirtió Tom Kucharz, portavoz de la organización.

España es 'especialmente' responsable de esa situación porque, según Kucharz, 'es el puente que une la UE con América Latina'. 'Esa función es la única baza de la que dispone el Gobierno durante su presidencia y con la cumbre de este fin de semana pretende explotarla', denunció. En su opinión, los tratados que se piensan firmar en Madrid buscan 'captar nuevos mercados para 'impulsar el crecimiento de la UE desde el exterior'. Lo cierto es que el desbloqueo de las negociaciones con Mercosur, según el Ejecutivo, 'tiene muchísimo valor potencial'.

En el marco de esta contracumbre, Izquierda Anticapitalista organizará un mitin el sábado, a las 20.30 horas en el Instituto Cervantes, en el que participará el líder anticapitalista francés Olivier Besancenot. El domingo, una manifestación recorrerá Madrid bajo el lema Contra la Europa del capital.

Cambiar los propósitos por realidades. Es uno de los objetivos de la próxima cumbre UE-América Latina y Caribe que se celebrará en Madrid del 17 al 19 de mayo, según la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que destaca el duro trabajo del Ejecutivo para que 'en mayo América Latina llegue al corazón de Europa'. De momento, han confirmado su asistencia 54 países, 34 de los cuales estarán representados por presidentes o primeros ministros. Entre ellos, el presidente de Venezuela, Hugo Chavez. Aún no se han pronunciado Reino Unido y Grecia.