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La ONU confirma el uso de munición real contra los manifestantes en Irán

Las autoridades iraníes admiten hasta ahora 41 muertos en las protestas –además de 1.186 detenidos–, pero una portavoz de la ONU asegura que una ONG fiable y que recoge datos de manera rigurosa señala que los muertos son al menos 76.

Protestas en Barcelna por la situación de las mujeres en Irán.
Manifestantes protestan tras la muerte de Mahsa Amini, quien murió tras ser detenida el pasado 13 de septiembre en Teherán por llevar mal puesto el velo, este martes en Barcelona. Marta Pérez / EFE

La represión de las autoridades iraníes contra los manifestantes que protestan desde hace días en las calles por la muerte hace once días de una joven tras ser detenida por la policía de la moral iraní por llevar mal puesto el hijab se ha endurecido en los últimos días. La ONU confirmó este martes que las fuerzas de seguridad iraníes han utilizado en ciertos momentos municiones reales contra los participantes en las protestas antigubernamentales.

"Las fuerzas de seguridad han respondido en ocasiones con municiones reales", declaró hoy en Ginebra la portavoz de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani

Mientras que las autoridades iraníes han admitido hasta ahora 41 muertos en las protestas –además de 1.186 detenidos–-, Shamdasani dijo que una ONG fiable y que recoge datos de manera rigurosa ha señalado que los muertos son al menos 76, en once provincias del país.

La ONU denuncia también que en paralelo a la violenta represión, las comunicaciones por cable e inalámbricas son cortadas continuamente, al igual que el acceso a internet y a distintas redes sociales, una táctica habitual para evitar la organización de la ciudadanía y la difusión de denuncias.

"Nos inquietan los comentarios denigrantes de algunos líderes y el uso aparentemente desproporcionado e innecesario de la fuerza contra los manifestantes", señaló Shamdasani.

Según la Oficina de Derechos Humanos, entre los arrestados figuran defensores de los derechos humanos, abogados, activistas sociales y una veintena de periodistas.

Asimismo, denunció la continúa impunidad de la que gozan los responsables de las muertes de manifestantes y de otras violaciones de los derechos humanos, tanto en el contexto de las actuales protestas como en las ocurridas en noviembre de 2019, julio de 2021 y el pasado mayo.

Shamdasani lamentó no poder ofrecer más detalles de esas violaciones porque el Gobierno no permite que observadores de su organismos entren al país, por lo que sus informaciones provienen de organizaciones locales que gozan de su confianza por el trabajo escrupuloso que realizan.

Concentraciones en Madrid y Barcelona

Las protestas han cruzado fronteras. Ha habido manifestaciones en varios países europeos, entre ellos en España. Varias decenas de iraníes, en su mayoría mujeres, se concentraron este martes ante el Congreso de los Diputados para sumarse a la condena por la muerte de la joven kurda Mahsa Amini. También hubo una concentración en Barcelona. 

En la protesta en Madrid, convocada por la Asociación Pro Derechos Humanos Iraní en España, se han colocado rosas sobre fotografías de víctimas de la represión del régimen iraní, mientras se han coreado cánticos como "Mahsa somos todas", "la policía de la moral, la vergüenza de Irán" y "abajo la teocracia, arriba la democracia".

Han tomado la palabra al megáfono varios exiliados iraníes, entre ellos la presidenta de la asociación, Fariba Ehsan, quien ha pedido a los españoles que "estén al lado del pueblo iraní para poder seguir en la lucha".

Por su parte, el Gobierno español ha condenado este martes la violencia ejercida contra manifestantes en Irán. El Ministerio de Asuntos Exteriores ha emitido un comunicado donde se expresa que los derechos humanos, y en particular con los derechos de las mujeres, "han de ser respetados en cualquier circunstancia y de acuerdo con los instrumentos internacionales de vigencia universal". Además, el Ejecutivo exige "que se ponga fin a las detenciones arbitrarias y a cualquier otra medida o restricción contra manifestantes pacíficos, periodistas y otros ciudadanos y ciudadanas que ejercen sus libertades cívicas".

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