Cinco soldados polacos de la misión de la OTAN murieron hoy en Afganistán al estallar una mina de cien kilogramos de potencia al paso de su vehículo blindado, en las cercanías de la ciudad de Roza (oeste del país), donde la unidad a la que pertenecían lleva a cabo labores de reconstrucción y asistencia a la población civil.

Los militares muertos transitaban en un convoy de varios vehículos a bordo de un blindado tipo M-ATV, que quedó completamente destrozado tras la explosión del artefacto. 'La carga era muy potente ya que el tipo de vehículo que trasladaba a los soldados polacos se considera relativamente resistente a este tipo de detonaciones', explicó el primer ministro polaco.

El convoy se dirigía a comprobar el avance de los trabajos en la reconstrucción de un mausoleo, uno de los proyectos que desarrollaba la unidad polaca en esta localidad. Los cinco soldados, que perdieron la vida en el acto, pertenecían a la Brigada Mecanizada Bartoszycka, con sede en el noreste de Polonia.

Los insurgentes han matado a 554 soldados de la OTAN en lo que va de año'Es un auténtico drama', lamentó el primer ministro de Polonia, Donald Tusk, en una rueda de prensa improvisada en la que transmitió sus condolencias a las familias y al Ejército polaco.

Por su parte, un portavoz talibán, Zabiulá Muyahid, reivindicó en declaraciones telefónicas a Efe la autoría del ataque. Sin embargo, Muyahid situó en siete el número de víctimas mortales.

Con este ataque, el mayor que sufren las tropas polacas destinadas en Afganistán, asciende a 36 el número de polacos muertos en ese país por acciones insurgentes, 31 de ellos uniformados.

Con las cinco bajas de hoy, ya son 554 los militares de la OTAN fallecidos en Afganistán durante 2011, según el portal especializado icasualties.org.

Este año está siendo el segundo más mortífero para las tropas internacionales desde el inicio del actual conflicto, solo superado por el pasado 2010, cuando murieron en Afganistán 711 militares de la misión de la OTAN.

El contingente polaco consiste en 2.580 efectivos, del total de 130.000 soldados actualmente bajo el mando de la OTAN.

La provincia de Ghazni, situada a medio camino entre Kabul y el bastión espiritual de los talibanes, Kandahar, es una zona conflictiva y de fuerte actividad insurgente.