Medios aéreos y terrestres han trabajado duro para impedir el avance de las llamas de un incendio "con mala evolución" declarado este jueves en el entorno de la localidad cacereña de Casas de Miravete. Pero, finalmente, ni el esfuerzo de los operativos ha podido detener la quema y se ha extendido hacia el Parque de Monfragüe.

Como consecuencia, el municipio ha sido evacuado de manera preventiva durante la madrugada de este viernes. Según explica el 112 de Extremadura, la evacuación se ha decidido a instancias de la valoración técnica del mando directivo del Plan de Lucha contra Incendios Forestales de Extremadura (Infoex).

El fuego, clasificado de nivel de riesgo 2, el segundo de mayor gravedad, amenaza edificaciones aisladas y ha obligado a cortar la N-5 entre los kilómetros 207 y 212, a la altura del municipio afectado, por el denso humo generado. El espacio protegido de Monfragüe ocupa 18.400 hectáreas y coge a poblaciones de cigüeñas negras, alimoches, buitres y águilas imperiales.

El incendio se suma al de Las Hurdes, que este jueves cumplía su cuarta jornada, y se ha reactivado por la tarde en una zona que los responsables de su extinción califican de "crítica". La superficie total quemada supera las 6.000 hectáreas, 3.000 en suelo extremeño y 3.300 en Castilla y León, según datos de los gobiernos regionales.

En Salamanca, la ceniza se extiende ya por toda la Sierra de Francia y los equipos de bomberos, agotados, imploran ayuda al Ejecutivo regional para luchar contra su propagación. Los operativos denuncian que "la Junta ofrece a la gente que lleva 15 horas trabajando un bocadillo, una pieza de fruta y una botella de agua", y aseguran estar bebiendo gracias al apoyo de los vecinos de la zona.

El movimiento Bomberos Forestales en Lucha de Castilla y León ha pedido la dimisión del consejero de fomento y culpan a Alfonso Fernández Mañueco de ser "cómplice" del desastre agreste por su incompetencia.